Día de gala en el Santiago Bernabéu. Un duelo amistoso que ponía en escena a dos grandes selecciones como España y Brasil. Un duelo para reivindicar la lucha contra el racismo bajo el lema 'Una misma piel'. Y un duelo que terminó definiendo el punto de penalti en el tramo final.
España quería dejar atrás las dudas que desprendió en el duelo contra Colombia y lo hizo, en parte. Firmó una primera parte notable gracias a los goles de Rodri, de penalti, y de Dani Olmo, pero Rodrygo y Endrick devolvieron la igualdad. Comenzó a trabarse y no fue hasta el final cuando una nueva pena máxima lanzada una vez más por Rodri y otra para Brasil, lanzada por Paquetá, cerró el duelo en empate.
Luis de la Fuente decidió cambiar casi al completo su equipo titular, solo repitió Laporte, para optar por un equipo más ofensivo con Dani Olmo, Lamine Yamal, Nico Williams y Morata. Un once de lo más explosivo ante una selección brasileña con Vinicius como capitán.
España firmó una primera parte plácida ante una selección brasileña casi desaparecida salvo por un par de destellos de Rodrygo. Lo intentó con un centro de Cucurella para Lamine que se marchó alto y con otro centro de Nico que no encontró rematador.
El gol no tardó en llegar. Fue Lamine, que traía de cabeza a la defensa brasileña, el que en una gran acción individual tiró una diagonal hacia dentro para superar a Wendell para después terminar siendo derribado por Joao Gomes.
Fue Rodrigo, el hoy capitán de España, el encargado de lanzar la pena máxima. Y no falló para celebrar un tanto de lo más emotivo, con dedicatoria especial a su abuelo, que falleció esta misma semana.
Poco después, en el 16', llegó la primera réplica de Brasil, en una acción de peligro de Rodrygo que terminó en un balón suelo de Vinicius, pero su disparo acabó en las manos de Unai Simón.
Un destello que no dejó que España tuviera un dominio cómodo del partido. Llegaba y creaba peligro, y a punto estuvo de aprovechar Dani Olmo un mala entrega de Bento, pero se le fue largo el control. Se resarció pronto. Tan sólo dos después, recibió en el área, tiró un caño espectacular a Berlado, se marchó de Bruno Gimaraes y sacó un zurdazo para batir la portería del meta brasileño.
Brasil no bajó los brazos y Rodrygo, el más listo de la clase, aprovechó un error de Unai Simón en la salida de balón para batir por arriba al meta vasco. Un gol que penalizó a España y provocó que los de Dorival Júnior se metieran en el partido antes del paso por vestuarios.
En la segunda mitad, lo intentó Rodri y Carvajal, pero fue Endrick, en sus primeros minutos en el Bernabéu, el que quiso dejar su firma. El '21' no los quiso desaprovechar y consiguió aprovechar un mal despeje de Laporte tras un córner para sacar un buen disparo que rozó lo justo a Le Normand para acabar dentro de la portería.
España perdió gas y cada pérdida suponía una ocasión para Brasil. Lo intentó Fabián desde fuera del área y luego con otra que atrapó Bento sin problemas. Llegó también la ovación por parte del Bernabéu a Vinicius al ser cambiado y un disparo de Dani Olmo desde la media luna que el meta brasileño detuvo en dos tiempos.
Luis de la Fuente dio entrada a Oyarzabal y Pau Cubarsí por Morata y Le Normand, y cuando parecía que el partido se moría con el empate en el marcador, un penalti de Berlado a Carvajal dio oxígeno a España por medio de Rodri, pero otro penalti se lo quitó. El de Carvajal a Galeno. Fue ya en el último suspiro cuando Paquetá se encargó de ejecutarlo y dejar las tablas en el marcador.