Y mereció ganar
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| Málaga CF - Sevilla FC | |
2 | 2 |
| Goles: 1-0, Salva (m.18). 2-0, Salva (m. 31). 2-1, Kanouté (m. 73). 2-2, Luis Fabiano (m. 84). | |
El Sevilla fue mejor pero los errores defensivos lo dejaron 2-0 en contra. El árbitro anuló un gol legal a Squillaci con 0-0. Gran reacción en la segunda mitad.
El empate que ha logrado hoy el Sevilla en Málaga ha sido injusto, por lo que la derrota habría sido del todo incomprensible. El equipo de Jiménez ha sido netamente superior al de Antonio Tapia desde el inicio hasta el fin, pero por cosas del fútbol, y por errores infantiles, tanto arbitrales como de Mosquera como de Squillaci, se fue al descanso 2-0. Se miraban los jugadores sevillistas sorprendidos por cómo discurría el partido en el campo y por cómo se plasmaba en el marcador. Porque el Málaga ha llegado dos veces en todo el partido y ha anotado dos goles. En ellos han colaborado muy activamente la zaga nervionense, pero aún así no se ha rendido el Sevilla y ha logrado una remontada que le permite sumar un punto importante por la clasificación y por el resultado, pero que no deja de saber a poco.
Cuota importante de culpa en el desarrollo del partido ha tenido el mal árbitro que es Teixeira Vitienes. En el minuto 6 anuló un gol legal a Squillaci de cabeza que podría haber cambiado el desarrollo del encuentro. Ya en las postrimerías del encuentro volvió a dejar su rúbrica pitando una falta inexistente a Luis Fabiano cuando se quedaba solo ante Goitia. Pero el partido también tiene otro análisis, al margen del arbitral. Pese a su superioridad, el Sevilla se fue al descanso dos goles abajo por un fallo infantil de Mosquera al caerse ante Salva y por un despiste conjunto del colombiano y Squillaci.
En la segunda parte, con este resultado contrario, Jiménez se la jugó y sacó al campo a Adriano y Capel por Duscher y Escudé, y la jugada salió bien, porque el Málaga apenas pasó del mediocampo y el Sevilla gozó de ocasiones clarísimas, como un tiro al larguero de Fernando Navarro, alguna llegada de Capel y algunas acciones de Kanouté. Al final, fue el malí el que abrió la lata, aunque el mérito es de Perotti, que salió al campo y volvió a dejar impronta de buen jugador. A él se debe la jugada del 2-1. La del 2-2, ya con el Málaga con diez tras la expulsión justa de Calleja, llegó de la mano de Luis Fabiano, falta le hacía, tras un gran pase del lateral en La Rosaleda Adriano. Pudo y debió ganar el Sevilla, que por momentos se comió a un efectivo pero pobre Málaga, pero el tiempo no dio para más. Debe lamentarse el cojunto nervionense por no haber ganado en Málaga siendo tan superior. Puede congratularse de su remontada. Puede darse con un canto en los dientes el Málaga por el punto logrado. Y debe el comité de árbitros bajar de una vez a los malos árbitros. Y Teixieira lo es.