El futuro del Sevilla a partir de la próxima temporada comienza a quedar definido. La planificación está en marcha y la figura del entrenador cada vez está más definida igualmente, y esa figura, sobre todo tras el partido del equipo en Getafe, está muy alejada de la de Gregorio Manzano. Tanto es así que, según apunta Marca, el técnico de Bailén ya tiene asumida su marca y de hecho empieza a moverse pensando en el futuro.
En el club, a pesar de su discreción, ya tenían decidido no contar con él, a la espera de algún milagro al final de temporada en todo caso. Ahora el entrenadoer sevillista admite la situación y está abierto a nuevas posibilidades. De hecho, es consciente de que comenzó a negociar con el Sevilla con Antonio Álvarez aún en el banquillo y que esa circunstancia se puede repetir.
