"Está trabajando de forma normal, pero requiere unos días hasta el próximo martes, que se incorporará con normalidad a los entrenamientos", ha señalado.
Naranjo ha aclarado además las pruebas a las que el jugador ha sido sometido en Houston: "Le han hecho pruebas exhaustivas para comprobar que el tipo de malformación no era peligrosa para él, y va a poder seguir jugando con garantías. Se trataba de malformación congénita, que puede tenerla toda su vida y no enterarse de nada. En el caso de un deportista no suele haber síntomas. En su caso fue un hallazgo casi casual, porque en un electrocardiograma vimos algo raro que suele darse como natural, pero fue el que nos hizo seguir la pista".