En ese encuentro, Gary Medel fue expulsado por un roce con Cesc, que exageró y provocó la expulsión del chileno. Después el catalán argumentó que le había hecho el gesto de golpear. Pero lo cierto es que, según explicó Reyes, el mismo Cesc sabía perfectamente lo que estaba haciendo. "Hablé con él después del partido en el estadio, y me lo reconoció (que había exagerado). 'Ya sabes, íbamos perdiendo...', me dijo". Así lo explicó el futbolista del Sevilla.
Un argumento más para reafirmar lo que ya se sabía y lo que el mismo Comité ha llegado a corroborar, a pesar de mantener la sanción, que no hubo tal cabezado y que Cesc puso demasiado de su parte.