La tensión se vivió principalmente cuando el accionista Agustín Martínez puso en entredicho la autoridad y la moralidad del presidente, José María del Nido, para presidir el Sevilla. Incluso llegó a pedir su dimisión. Este le contestó que hasta que no haya condena en firme "no hay nada", y que llegado el caso dimitirá.
Pero la Junta comenzó antes, mucho antes. Su inicio estaba previsto para las 17.30 horas, aunque comenzó con 47 minutos de retraso por la tardía llegada del notario, que "ha tardado en aparcar", y por ciertos problemas técnicos.
Entre los presentes en la Junta se encontraban, entre otros muchos, Luis Carrión, hijo de Rafael Carrión, y también José María Cruz, exvicepresidente de la entidad.
José María del Nido comenzó con su informe anual y se procedió a la lectura del ejercicio económico.
Tras el mismo, llegaron las primeras preguntas de los accionistas. "¿Dónde está el dinero? Usted, presidente, habla de ventas pero... ¿y las compras?", cuestionó el socio y accionista Agustín Martínez, el más crítico durante toda la Junta. También recibió otras preguntas incómodas el dirigente.
José María del Nido tomó la palabra entonces para responder y para aclarar el asunto de las comisiones, de Doyen Group y defender a Monchi, del que ha dicho que "es el mejor director deportivo de la historia del Sevilla". Asimismo, se referió a la polémica con los Biris y a las últimas medidas, recordando episodios comprometidos del último derbi.
Luego se procedió a la aprobación de las cuentas. Se aprobaron 75 millones de presupuesto para la temporada 2012/13, si bien para cumplir con este presupuesto el club debería ingresar 16 millones de euros en venta de jugadores.
Uno de los puntos más calientes fue el apartado de la propuesta de los nuevos consejeros, con el nombre de José María González de Caldas hijo como foco de crispación. Al final la representación accionarial no reflejó tanta "indignación" y "sorpresa", según palabras de pequeños accionistas, y fue nombrado por mayoría de paticipaciones. Como fue nombrado el consejo y el presidente, hasta 2018, con un respaldo del 96,63% de los accionistas.
De nuevo salió Agustín Martínez a la palestra y entonces afloraron las tensiones. Dijo a Del Nido que no tiene "autoridad moral para presidir el Sevilla", recordó su condición jurídica y penal, le instó a que se pensara su reeleción como presidente y lo comparó con Gil y Gil, incluso habló de 'Loperización' ("no haga comparaciones odiosas, le repito", respondió Del Nido). Ante estas palabras, un nutrido grupo de los accionistas mandó callar varias veces a Martínez, lo abuchearon en varias ocasiones. Se vivieron momentos de tensión e incluso el presidente evidenció cierta tensión en su respuesta. "Si me condenan o me inhabilitan presentaré mi dimisión. Lo he valorado y creo que ayudo más al Sevilla quedándome que yéndome. Me han condenado injustamente y una condena en primera instancia equilvale a cero", señaló Del Nido.
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