Hazañas a largo plazo

Quizás el partido de este lunes ante el Celta no merezca recibir calificativos de histórico, ni vaya a cambiar la trayectoria del Sevilla en los últimos años, ni vaya a ser un punto de inflexión, pero sin embargo el partido de este lunes es, debe ser, el inicio de una larga y complicada hazaña que tal como ha ido la temporada podría tener igualmente tintes históricos y calificativos grandilocuentes.

El equipo nervionense recibió un duro palo el pasado miércoles viendo truncado su sueño de una nueva final copera. El Atlético de Madrid se merendó ese sueño a las primeras de cambio.
Pero ahora, una vez pasado ese tremendo mazazo, esa desilusión, el conjunto de Unai Emery debe levantarse para intentar alcanzar una meta realmente complicada, Europa.
Pero si bien los argumentos negativos son evidentes y recurrentes (la distancia en puntos con los puestos altos, la falta de profundidad de la plantilla, el flojo momento de algún que otro jugador decisivo, la falta de constancia del equipo en muchas fases del curso), ya es un punto de inicio que exista algún motivo para el optimismo, al menos uno.
Y lo hay, sí, lo hay. Europa está lejos, pero al menos se divisa en el horizonte. La clasificación y la final de la Copa dictan que el séptimo clasificado entre en competición europea. Eso quiere decir que ahora mismo la frontera es el Betis, y que el Sevilla debe ganar hoy sí o sí y de esa forma podría ponerse a cinco puntos de su eterno rival. Cabría la posibilidad de que Europa se ampliara a la octava plaza si el Málaga no convence al TAS y no evita su suspensión de la UEFA, pero es algo que está aún por ver.
A pesar de esa distancia, el Sevilla puede agarrarse a una épica remontada de tres meses si tiene claro algunos fundamentos. Para empezar, que este reto solo se puede plasmar con Unai Emery en el banquillo. El técnico vasco ha dotado al equipo de ciertos resortes que lo han hecho mejorar, y en eso hay que confiar.
También hay que confiar en los once jugadores de Emery, 12 o 13 como mucho. La plantilla es limitadísima, a veces da pena mirar al banquillo, como en el partido de la Copa, hay pocos recursos, pero los que hay están en el campo casi siempre. Emery tiene claro que esta hazaña se consigue por medio de Rakitic, Navas, 'Kondogbias', 'Medeles' y alguno más, y hay que rezar para que no se resfríen de aquí al final de temporada. A ese grupo ha de sumarse con goles ya Negredo. Y de ese grupo parece salirse ya Reyes, retratado ante el Atlético.
Luego está por ver cómo soluciona Emery el asunto de la defensa. Seguirá confiando en Coke y Alberto Moreno, a tenor de los ensayos, pero en el centro de la defensa tiene pocos elementos y uno de ellos, Botía, llega a este lunes con la cara de circunstancias de haberse 'cargado' gran parte de la eliminatoria ante el Atlético. Es inevitable pensar que la zaga, ya sin Spahic, es el mayor hándicap, junto con la falta de alternativas de la plantilla, del Sevilla hasta el final de la temporada.
Pero en cualquier caso, todo debe ser confianza. Y el punto de partida es el de hoy. Ganar al Celta es ponerse en camino, superar al sevillista Varas es centrarse en otro objetivo, creer en él. Un objetivo de tres meses, un objetivo y un reto a largo plazo, pero en el camino mismo, en la hazaña misma, está la redención de este grupo y de este equipo sevillista que tan mediocre ha resultado en la Liga hasta el momento.
 
Alineaciones probables: 

Sevilla FC: Beto; Coke, Fazio, Botía, Alberto Moreno; Medel, Kondogbia; Jesús Navas, Rakitic, Manu; Negredo.
Suplentes: Palop; Cicinho, Fernando Navarro, Javi Hervás, Maduro, Reyes, Babá. 

RC Celta de Vigo: Javi Varas; Jonny, Cabral, Demidov, Lago; Oubiña, López; Fernández, Krohn-Delhi, Orellana; Iago Aspas.
Suplentes: Álvarez; Bellvis, Vila, De Lucas, Pranjic, Bermejo, Chu-Young.