Es, por tanto el equipo de Emery el equipo que más provecho saca de las jugadas a balón parado. A veces por el mérito de la estrategia (gol de Alberto Moreno ante el Athletic, por ejemplo), a veces por la efectividad en los remates y en las asistencias (el mismo gol de Coke).
La media nervionense es de 0,32 goles por partido en esta faceta del juego, la mejor de toda la máxima categoría.