El consejo del Sevilla y la idoneidad de asignarse sueldos

El consejo de administración del Sevilla FC debatió este martes la posibilidad de establecer una remuneración para los cargos dirigentes del propio consejo y así acometer la profesionalización del mismo. Al menos esa es la intención y se debatió en profundidad entre todos los miembros. Pero finalmente no llegó a haber consenso. Es decir, no todos ven adecuado que José Castro, por ser presidente, o Del Nido Carrasco, por ser vicepresidente, cobren del Sevilla.

Así lo asegura Marca, que desvela que el de este martes fue un debate previo para sopesar la opción de presentar una propuesta en la próxima Junta de Accionistas. Es más, en el consejo de administración incluso se llegaron a debatir las cantidades de los sueldos. Porque, al contrario de en otras ocasiones, en las que ya se planteó el tema, esta vez la propuesta estaba más trabajada y era más completa.
En ella se incluían sueldos para el presidente, el vicepresidente y el resto de consejeros, algo que no se contemplaba no en anteriores propuestas. Castro tendría la mayor remuneración como presidente, seguido por Del Nido. El resto recibirían una cantidad mensual simbólica.
Pero finalmente no ha salido adelante, aunque ya son varios años en los que la posibilidad está sobre la mesa, cada vez con más fuerza.
En estos momentos, altos directivos como el director general o el director deportivo ya tienen sueldo, pero el presidente o el vicepresidente, no. Puede que sea el próximo año el elegido para esta propuesta de remuneración, que debe ser aprobada en Junta de accionistas, ya que supondría una modificación de los estatutos. Aunque pudiera suponer un debate moral, en el consejo se ve más que lógico que la dedicación de algunos de sus miembros se vea recompensada.

Del Nido ya lo intentó

Este debate en el consejo no es nuevo y José María del Nido, expresidente del Sevilla, ya dejó caer en alguna ocasión la posibilidad de que el cargo de la presidencia fuera remunerado. Pero prefirió a esperar por la sensibilidad de los aficionados y también de los accionistas y nunca llegó a salir adelante como propuesta. Ahora, pasado el tiempo, vuelve a ser recurrente.