En el partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa del Rey, se vio, de nuevo, a un Iago Aspas muy cabreado por las decisiones de Emery. El gallego está pasando por sus peores momentos desde que llegó al Sevilla. Hace varios partidos, las cámaras de Canal Plus captaron como el delantero recriminaba a Emery algunas decisiones, e incluso teniendo que ser callado por sus compañeros para que el asunto no vaya a más. Sin embargo, la estampa se volvió a repetir el pasado jueves.
Emery agotó los cambios, después de dejar a Aspas calentando durante varios minutos. El gallego al ver que no entraba dentro de los cambios de Emery, se quitó el peto de calentamiento y lo tiró al suelo en símbolo de rabia, y posteriormente dio golpes al banquillo sevillista. Una vez concluido el partido, Unai recalcó que no pudo meter a Aspas debido a la situación del partido. Hoy, en la previa ante el Espanyol, Emery ha señalado que entiende el cabreo del gallego, y que es más, el propio técnico ha señalado que él también se cabrea con sus jugadores, pero ha comentado que él intenta hacerlo cuando no hay cámaras delante.
"Es un jugador importante. Su actitud diaria es muy buena, trabajamos para que sus prestaciones sean positivas. Los necesitamos a todos, y a él también. Entiendo su enfado, yo también me enfado con los futbolistas, lo que pasa es que no se ve. Los jugadores tienen un proceso de aprendizaje, es algo natural, los enfados los tenemos todos. A mí no se me nota ya que intento hacerlo de una manera equilibrada, los enfados son naturales", ha comentado Unai Emery.