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El trampolín alemán

Álvaro Ramírez

Cuando se echa la vista atrás, cuando el sevillismo, lacónico o eufórico, rememora el pasado glorioso de su equipo en la vieja nueva Europa, esa que da alegrías a través de la UEFA, Liga Europa, Europa League o cuantas denominaciones tenga, siempre hay citas, más allá de las definitivas, que marcan los exitosos caminos y dejan regusto dulce en la memoria y hasta en la historia.

Porque qué sería de Eindhoven sin la noche de la victoria ante el Lille, o por supuesto la del Schalke; qué sería de Glasgow sin Donetsk; qué sería de la Copa de 2010 sin aquella noche de Reyes en el Camp Nou; qué sería de la Copa del 2007 sin el gol de Kanouté en el Villamarín; qué sería de la Liga Europa pasada sin las noches mágicas del derbi de octavos y de la remontada en los cuartos ante el Oporto. Tan importantes fueron en su momento esos pasos bien dados, firmes, fuertes, que trascendieron la propia competición y acabaron con el Sevilla potente en la Liga, cuarto, quinto, campeón de Copa...
Son esos partidos, no definitivos pero trascendentales, porque van más allá de lo común, los que en realidad refuerzan y cimentan esas otras noches que por lógica se llevarán la gloria. Y ciertamente, y aunque solo el tiempo dota de historia a las citas, esta de Alemania, está de Moenchengladbach tiene pinta, color y halo de noche trascendental, para bien o para mal. Porque si el Sevilla es capaz de eliminar a un equipo de la entidad del Borussia habrá vuelto a reencontrarse en Europa. Luego vendrá lo que vendrá, pero la primera piedra, eliminando a uno de los conjuntos potentes del torneo, estará puesta. Porque además habrá salvado una de las 'finales' de la temporada, la de seguir vivo en Europa, más allá de la Liga. Y porque además podrá olvidar poco a poco el amargor de la Copa con las mieles europeas. Ese panorama optimista se vuelve sombrío girándolo 360º y pensando lo que supondría un adiós tan prematuro en el Continente, una única sola vía de ilusión... Ese penorama pesimista pinta decepcionante tal como empezó el año.
Ambiente infernal
La caldera del Borussia Park lleva días calentándose, lleva días fraguando lo que será un ambiente hostil para el Sevilla. Serán 45.500 gargantas teutonas, convencidas, ilusionadas y esperanzadas de eliminar al campeón y al primer gran obstáculo. El Sevilla sabe de esos ambientes porque crea en casa uno cada vez que tiene ocasión, pero debe gestionar bien las emociones, la presión y la personalidad en tales escenarios. Es la primera pica para poder superar este reto. Para algo es este Sevilla el campeón vigente y tricampeón de la coompetición.
El resultado
Lleva el Sevilla un buen resultado del Sánchez Pizjuán. El 1-0 lo es, sin duda. Pero deberá jugar con él. Por las intenciones que se atisban de Emery parece que reconoce la clasificación en el buen hacer defensivo de su equipo, pero sobre todo el ofensivo. Ganó en casa y jugó mejor cuando le jugó de tú a tú al Borussia, cuando le quitó la pelota. El Sevilla debe de marcar en el Borussia Park para fabricar su pase, al menos en teoría. De ahí que Reyes, Vitolo, en principio Banega vayan a ser titulares, y también Aleix Vidal y puede que Diogo. 
La portería y la defensa
Es el flanco débil del Sevilla, la portería sin Beto, y la defensa, a tenor de lo visto en San Sebastián. Pero tiene remedio Emery para este jueves. Recupera a Pareja y a Carriço para la zaga y eso debe de ser garantía de mayor tranquilidad, sin Arribas como peligro propio en el área. Con Fernando Navarro en el lateral también se debe ganar firmeza ante el conjunto alemán, que de fútbol sabe un rato y cuyos jugadores, que se mantienen terceros en la Bundesliga, saben cómo crear peligro y hacer daño a los rivales. Con todo, cabe recordar que el Borussia tiene debilidad en el ataque, le falta un delantero goleador, que quizás permitiría luchar en Alemania por la segunda plaza y haberse venido de Nervión con algún gol. Pero no lo hizo, y sí el Sevilla, y esa ventaja está ganada.
Alineaciones probables
Borussia de Moenchengladbach: Sommer; Korb, Domínguez, Stranzl, Wendt; Hahn, Kramer, T.Hazard, Xhaka; Raffael y Kruse.
Sevilla FC: Sergio Rico; Aleix Vidal, Carriço, Kolo, Navarro; Krychowiak, Iborra; Reyes, Banega, Vitolo; y Bacca.
 
 

febrero 26, 2015

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