Tras pasar sin pena ni gloria por el Sevilla, Rusescu vuelve a recuperar el nivel y las sensaciones como futbolista en el Steaua de Bucarest, el equipo donde despuntó antes de que el conjunto hispalense en encaprichase de sus servicios. Según informa Fanatik.ro, el cuadro de la Muntenia cuenta con una opción de compra sobre el ariete, pero estudia otras fórmulas para garantizarse la continuidad del rumano en la entidad.
Raúl Rusescu tiene contrato con el Sevilla hasta 2018, pero en la capital andaluza tenían claro desde el comienzo de la pretemporada que el rumano no contaría siquiera con la posibilidad de luchar por un dorsal en la plantilla, algo que probablemente volverá a ocurrir el próximo mercado estival. Así, le instaron a buscarse un nuevo destino, y apareció nuevamente el Steaua. Con la temporada llegando a su recta final, Rusescu suma 25 partidos entre todas las competiciones, con 10 goles en su casillero, de los cuales tan sólo dos han sido en el campeonato liguero, por cinco que ha anotado en cuatro partidos de Liga Europa.
Con la cesión, se fijo una opción de compra de 2,2 millones de euros ejecutable hasta el próximo 30 de junio, pero el tema económico torna las posibilidades de que el Steaua pueda hacerse en propiedad con los servicios del atacante en mínimas. No obstante, existe la opción de prolongar el préstamo una temporada más. Así, el cuadro azulgrana se encargaría, tal y como sucede actualmente, de la mitad de su salario, que asciende a 500.000 euros. Se trata de una opción que no convence del todo a un Sevilla que preferiría dejar de contar definitivamente con los servicios de Rusescu.
El representante del internacional rumano, Dragos Sirbu, ha declarado que espera aclarar la situación de Rusescu el próximo mes. “En mayo voy a viajar a Sevilla para discutir la situación de Raúl con los directivos. Necesitamos saber si el entrenador lo tendrá en cuenta para la próxima temporada. Habría ido antes, pero el Sevilla tiene ahora otras prioridades. Está ocupado con los partidos de Liga y Liga Europa. Pero Raúl necesita saber lo que va a deparar el verano para irse tranquilo de vacaciones”, manifestaba su agente.