Quién dijo miedo: a la caza del verdugo

Se respira ambiente de partido grande en Nervión. Un Sánchez Pizjuán inexpugnable desde más de un año recibe (a las 20.00 horas) a su último verdugo en liga, al último equipo capaz de pescar los tres puntos ante la hinchada blanquirroja. Por aquel entonces, el 9 de febrero de 2014, el FC Barcelona derrotaba al Sevilla FC por 1-4 en el 'renacer' de Leo Messi. Un año y dos meses después, los culés vuelven al coliseo sevillista como el todopoderoso líder de Primera división, el equipo más en forma de la categoría... precisamente por delante de los de Emery (quinto en la tabla, pero el segundo mejor conjunto del 2015). Duelo de titanes de un Sevilla que quiere vengar aquella derrota y seguir invicto en casa, y un Unai que tratará de vencer por primera vez en su carrera a los azulgrana después de 18 enfrentamientos. Con la duda de M'Bia, que podría volver al once, el Pizjuán se engalanará como en sus mejores noches, pues desde el jueves se colgó el cartel de no hay billetes. Un ambiente que apoyará a los suyos... y quién sabe a Rakitic, pues el recibimiento del croata, que vuelve a casa, es una incertidumbre.

El verdugo llega con la intención de romper la racha
El Sevilla se mide a su último verdugo como local. Su último, o su gran verdugo de la última época. De hecho, no vence a los azulgrana en el Sánchez Pizjuán desde la temporada 2006-2007, con goles de Kerzhakov y Daniel Alves. Desde entonces, han ido desfilando diversos entrenadores por el banquillo nervionense, y ninguno de ellos ha dado con la tecla para derrotar al Barcelona. Precisamente, desde que el equipo de Leo Messi derrotase a los blanquirrojos aquel 9 de febrero, ningún aficionado sevillista ha presenciado una derrota de los suyos en su feudo en liga. En total, 26 victorias y 5 empates son un bagaje que está dejando su sello en los anales de la historia de la Liga. De sumar algún punto ante los de Luis Enrique, tan sólo restaría el Madrid de los equipos 'grandes' por visitar el coliseo de Nervión.
Emery, ante su bestia negra
El hombre de moda en el Sevilla, Unai Emery, se enfrenta a su reto más duro y desesperado hasta la fecha. Tratará de superar de una vez por todas a su bestia negra desde que se sienta en los banquillos: el Barcelona. Hasta en 18 ocasiones, con cuatro clubes diferentes (Almería, Valencia, Spartak y Sevilla), se ha medido el técnico a los azulgrana. El balance no puede ser más negativo: cero triunfos, cinco empates y trece derrotas. Tras batir diversos récords en el banquillo nervionense, buscará superar este reto particular. Para ello, podría apostar por un trivote en la medular, compuesto por M'Bia, que podría volver tras su lesión, Krichowiak, e Iborra. La duda gira en torno a Banega, eje de la medular sevillista, pero que tiende a ser el sacrificado cuando su míster apuesta por alinear juntos a 'las tres torres'.
La Champions, más a tiro que nunca
Aunque ante un partido de tal magnitud no es recomendable alzar la vista a otro objetivo que descentre la atención, no es menos cierto que de lograr los tres puntos, y si el Valencia no lo hace, el Sevilla rebasaría al conjunto entrenado por Nuno en la tabla clasificatoria. El empate en el último momento del Athletic de Bilbao en el Nuevo San Mamés del pasado jueves vino como agua de mayo para la entidad comandada por José Castro, que vuelven a ver cómo los puestos de Champions, el objetivo encubierto (por mucho que se empeñen en negarlo) del club, se sitúan a tiro de piedra. Una piedra relativamente pequeña, pues un único punto (dos, con el goal average) separa a ambos conjuntos, cuya rivalidad va in crescendo con el paso de las jornadas. El calendario beneficiaría a los ché, pues no disputan más de una competición, por las dos de los sevillistas, pero la amplitud de plantilla conformada por Monchi y su equipo de ojeadores está impulsando a unos jugadores que luchan de tú a tú con los de Mestalla y no bajan el pistón. Por no decir, que la próxima semana visitan el Camp Nou.
Nervión será una olla a presión
El sevillismo tiene ganas de algo grande esta temporada. La comunión con el equipo es total, y desde hace unas semanas, también con su entrenador. La cuota de responsabilidad de la hinchada del Sánchez Pizjuán en los 31 partidos sin perder es alta, y ante el Barcelona preparan una caldera. Una olla a presión como la que presentaron ante el Espanyol en Copa, aunque esta vez, con la ilusión de un mejor resultado. Este jueves se colgó el cartel de 'no hay billetes' en las taquillas del estadio, por lo que no cabrá un alfiler en las gradas blanquirojas. Las disputas con la directiva no tienen cabida ante una cita de esta envergadura.
Rakitic vuelve a la que fue su casa
Vuelve 'el rubio de Pinomontano' al césped de la que fuera su casa, aunque con una elástica diferente. En esta ocasión lo hará como rival, e incluso apunta a titular. El croata, que es un hombre importante para Luis Enrique, se marchó del Sevilla el pasado verano dejando en las arcas hispalenses alrededor de 20 millones de euros, y tras levantar la tercera Liga Europa de la entidad. Pese al alto montante económico, no todo el sevillismo entendió esta marcha, o más que ella, las formas, pues Rakitic estuvo dudando si renovar o no, y fue tras la consecución del título en Turín cuando decidió marcharse. Sin embargo, los mensajes de cariño vertidos por el mediapunta hacia su exequipo han sido constantes, asegurando que 'echa de menos Sevilla', y que se sigue sintiendo sevillista desde la distancia. Es una auténtica incógnita el recibimiento que recibirá a partir de las 20.00 horas.
Posibles alineaciones:
Sevilla FC: Sergio Rico; Diogo, Pareja, Carriço, Tremoulinas; Aleix Vidal, M'Bia, Krychowiak, Vitolo; Iborra y Bacca.
Barcelona: Bravo; Alves, Piqué, Mathieu, Alba; Busquets, Iniesta, Rakitic, Neymar, Suárez y Messi.