El Sevilla, de momento, estaría en inferioridad en Tiflis

Poco a poco se van conociendo detalles de la Supercopa de Europa del próximo 11 de agosto en Georgia. Esta mañana, José Castro comentaba que, de momento, no se había llegado a las 200 entradas vendidas: “Apenas hemos vendido 155 entradas para la Supercopa, está en una zona muy lejana y complicada para que vayan muchos aficionados”. El presidente del Sevilla informaba, además, de que no se iba a financiar el viaje a los aficionados que decidieran desplazarse hasta Tiflis, como sí sucedió en Varsovia, pues entendía que aquellos hinchas que decidan asistir a la final y ya han adquirido su entrada, también tienen organizados su respectivo viaje.

Así, todo apunta a que el Sevilla estará en inferioridad en cuanto a aficionados en el Estadio Boris Paichadze. Y es que el Barcelona ha anunciado que, hasta la fecha, hay reservadas hasta 725 entradas, de las 1.808 que la UEFA le cedió. El club azulgraba informaba de que “este miércoles, a las 19 horas, se ha cerrado el proceso de solicitud de entradas para asistir a la final de la Supercopa de Europa”, al no superarse el cupo de entradas disponibles, el club no sorteará las entradas para designarlas “y por lo tanto todos los solicitantes podrán ir a la capital de Georgia a ver en directo el partido”. Papelito, en definitiva, de la UEFA, que parece empeñada en devaluar más si cabe un trofeo que, otrora, tuvo su encanto y prestigio, cuando se celebraba en Mónaco.