Si hay un encuentro que se espera en Sevilla con ganas, ése es sin duda el derbi. Históricamente, al Sevilla se le ha dado mejor que al Betis el partido de los partidos. A lo largo de los años, han sido más las victorias rojiblancas. De hecho, el Villamarín es el campo en el que más veces ha ganado el conjunto nervionense en toda su historia. Con todo, hay derbis que, lógicamente, marcan más que otros. A continuación, un repaso por los diez mejores momentos de los derbis en clave sevillista en los últimos 30 años.
Empezando por el más reciente, y seguramente por el que mejor recuerdo ha dejado de todos, está el derbi de vuelta de los octavos de final de la Europa League de la temporada 2013-14. El Sevilla llegaba al Benito Villamarín con un 0-2 en contra y logró una remontada espectacular, culminada con una tanda de penaltis a la que tampoco le faltó emoción y que pasará a la historia por ser la del ‘penalti de Nono’. Los goles de Reyes y Bacca pusieron bocabajo la grada visitante, abarrotada por más de 3.000 sevillistas, que acabó estallando de júbilo con el último penalti que tiró el canterano bético. Una tanda que el Sevilla también tuvo que remontar, pues Vitolo empezó fallando su penalti. Un recuerdo, en definitiva, imborrable para todo el sevillismo, que acabó viendo a su equipo levantando la ‘Terera’ en Turín.
En la temporada 2013-14 se vivió otro derbi especial. El Sevilla, que la campaña anterior le había endosado a su eterno rival un 5-1 esperado por pocos, logró infligir otro severo correctivo al conjunto verdiblanco, con una nueva goleada (4-0). Bacca, al poco de iniciarse el encuentro, hizo el primero, tras un gran pase de Reyes, nuevamente inspirado para la cita. El utrerano, además, provocó la segunda amarilla de Paulao, en una falta que acabaría en el 2-0 de M’Bia. Ya en la segunda parte, Vitolo e Iborra redondearon la noche, con la grada de Nervión pidiendo una nueva manita que finalmente no llegaría.
El que a priori apuntaba a ser uno de los derbis más igualados de los últimos años, por la situación en la tabla de ambos equipos, acabó con una goleada histórica que quedará en el recuerdo de toda Sevilla. El 18 de noviembre de 2012, el conjunto nervionense barrió del campo a su rival, con un contundente 5-1 en el que los goles se repartieron desde el segundo 13, en el que Reyes abrió el marcador, hasta el último minuto, en el que Rakitic cerró la cuenta. La primera parte sevillista fue sencillamente perfecta. En el minuto 5 el Sevilla ya ganaba 2-0, con gol de Fazio, un minuto después pudo caer el tercero de las botas de Negredo. Finalmente, Reyes aprovechó la pájara de Nelson en el área chica para hacer el 3-0 en el 33. Diez minutos después, el canterano ponía un centro perfecto al área para que Fazio rematara de cabeza e hiciese el cuarto. Rubén Castro hizo el gol del honor en el segundo tiempo.
Poco después de levantar la Supercopa de Europa ante el Barcelona, el Sevilla recibía en casa a su eterno rival en la tercera jornada de Liga 2006-07. Un encuentro que sólo pudieron ver los 45.000 aficionados que se dieron cita en el Ramón Sánchez-Pizjuán, en una calurosa tarde de septiembre, pues el Sevilla andaba enfrascado en una batalla por los derechos televisivos que impidió que se emitiera. El encuentro acabó con 3-2 para los blanquirrojos, con final feliz, pero mucho sufrimiento. Kanouté adelantó al Sevilla en el 25, pero el Betis acabó dándole la vuelta al marcador con un doblete de Sobis (minutos 41y 53). Poco después del segundo gol del punta bético, Kanouté marcó su segundo gol a pase de Navas. El partido parecía abocado al empate, pero en el 86 Renato sacó su magia a pasear. El brasileño se internó en el área y recortó, mandando al suelo a Rivera, amagó y chutó con la derecha, inapelable para Doblas.
El Sevilla-Betis de la temporada 2005-06 también tiene un hueco en el corazón de los sevillistas. Juande Ramos se estrenaba como sevillista en un derbi y había dudas sobre la motivación del equipo sin la figura de Joaquín Caparrós. Mediada la primera parte, Javi Navarro era expulsado por una patada a Dani. El partido se complicaba, pero al poco de iniciarse la segunda mitad, Maresca transformaba un penalti señalado a Joaquín por mano dentro del área. El italiano se quitó la camiseta para celebrarlo y veía tarjeta amarilla. A falta de cinco minutos para el final, el salernitano veía la segunda y dejaba a su equipo con nueve hombres contra los que no pudieron los verdiblancos.
En la jornada 24 de la temporada 2002-03, el Sevilla visitaba al Betis en un partido en el que Lopera decidió que no se vendieran entradas para el mismo. Todo estaba en contra del equipo de Caparrós, inferior a su rival en lo futbolístico y sin el apoyo de los suyos. Sin embargo, una vez más, los blanquirrojos se crecieron en la adversidad y lograron ganar el partido con un solitario gol de Marcos Vales tras una bonita jugada de Antoñito, a falta de 15 minutos para que concluyese el encuentro.
El estadio del Betis fue escenario del último derbi del siglo XX. Un derbi que se disputó en Segunda división y que acabó con victoria sevillista por 1-3. El equipo de Caparrós remontó el gol de Capi (m. 47), con gol de Tevenet y doblete de Olivera. Pero el partido tuvo su historia. Pablo Alfaro fue expulsado en el 66 por una durísima entrada sobre el propio Capi, que estaba siendo el mejor del equipo bético. A partir de ahí, el Betis se cayó y el Sevilla, a pesar de tener un hombre menos, logró darle la vuelta al marcador. Prats también fue expulsado, por penalti sobre Otero.
La temporada 99-2000, una de las peores en la historia sevillista, si no la peor, también tuvo sitio para dejarle alguna que otra alegría a la hinchada blanquirroja, como fue la victoria sobre el Barcelona (3-2) o la cosechada ante el Betis en casa (3-0). El Sevilla llegaba en puestos de descenso al derbi, en la jornada 7. Los de Marcos Alonso no dieron ninguna opción al eterno rival. El Sevilla fue superior de principio a fin. Prueba de ello, el gol de Quevedo en el minuto 1 y el tanto de Loren en el 88. Antes, en el 74 Juan Carlos, a pase de Francisco, tras un fallo garrafal de la defensa del Betis al sacar la pelota jugada.
En la temporada 96-97, el Sevilla se fue al hoyo, pero quiso brindarle una pequeña alegría a los suyos. El conjunto sevillista visitaba el estadio heliopolitano en puestos de descenso y con la soga al cuello. Jarni adelantó a los verdiblancos en el minuto 8 y el asunto se ponía feo. El gol de Prosinecki y la expulsión de Ríos en el 27 daban algo de esperanza a los sevillistas. Sin embargo, Jarni hacía el segundo gol en el 46. El Sevilla lo intentó, pero en una contra en el 86, Cañas mataba el encuentro… o eso parecía. Porque en apenas un minuto, Salva y Galván empataron el partido para un Sevilla que dos jornadas después descendería en el Carlos Tartiere.
Cierra el círculo el Betis-Sevilla de la campaña 90-91. El equipo entrenado por Cantatore se venció sin apuros en feudo verdiblanco, con un contundente 0-3. Un equipo que contaba en su delantera con una pareja de lujo, como Polster y Zamorano. Precisamente el delantero chileno firmó un doblete. Para el recuerdo quedará el gol de Martagón, que fusiló a Fernández.