Se rompió el hechizo de Nervión, y con él se fueron otras muchas ilusiones.
El Sevilla cayó en el Ramón Sánchez Pizjuán después de 17 victorias consecutivas, 13 en la Liga, y dice prácticamente adiós al Villarreal, o lo que es lo mismo, a la
Champions League, que se pone a nueve puntos. Cayó ante la Real Sociedad en un partido extraño, muy extraño, en el que no anduvo brillante, pero en el que quizás tampoco mereciera perder. Con todo, una pésima primera parte puso cuesta arriba un partido que parecía que se ponía cuesta abajo en la segunda, contra diez. Pero ni así. No estuvieron finos ni los jugadores en el campo ni el entrenador en el manejo de los cambios, sobre todo por inocuidad de algunos de ellos ante un rival en inferioridad. El caso es que no fue la noche del Sevilla y a estas alturas eso se paga caro, tanto como alejar uno de sus principales objetivos de la temporada.
Un gol tempranero y una primera parte acelerada supusieron demasiada rémora para un conjunto nervionense que echó de menos, sobre todo en la primera parte, a aquellos llamados a ser los que soportaran el peso del equipo. Los
Krychowiak, Reyes, Banega... no estuvieron o estuvieron rematadamente mal, y a ello se le unió una nueva indecisión de
Sergio Rico, indecisiones que empiezan a ser demasiado comunes en el meta internacional.
No anduvieron finos ni los jugadores en el campo ni el entrenador con el manejo de los cambios, a destiempo o errados Se rompió pronto la noche. Ni dos minutos habían corrido en el marcador y la Real Sociedad se puso por delante en una jugada a balón parado en la que se duerme Krychowiak y Markel Bergara rematara de manera impecable. No había dado tiempo a ver qué proponía el Sevilla, pero sí a ver que la Real Sociedad se situó mejor en el campo, que se armó en la medular y que ejecutó una presión que incomodó en todo momento al conjunto de Unai Emery. El caso es que el partido empezó prácticamente con 0-1 y con una Real que presionaba muy arriba y no dejaba al Sevilla desplegar su juego. Sobre todo porque los hispalenses no encontraron jugador alguno que los guiara, que mantuviera la pelota y que posibilitara habilitar al resto de jugadores. Ni Cristóforo ni Krychowiak sacaron la pelota con acierto ante la presión donostiarra, y Reyes y Banega, que de vez en cuando bajaban a intentar ayudar en esa tarea, ofrecieron un triste e inusual recital de imprecisiones y de pérdidas de balón. El Sevilla era una historia de impotencia, de cómo intentar y no lograr llevar la pelota cerca de Rulli. Para colmo, esas pérdidas se convertían en punzantes contras de la Real Sociedad, que además encontraba autopistas a la hora de contragolpear a la espalda de Reyes, Vitolo o Banega, a la espalda, en definitiva, de todo el centro del campo, por lo que tanto el doble pivote y la defensa se vio tremendamente superada.
El Sevilla, al menos, logró poco a poco, con mucho empuje, con mucha precipitación también, y con el aliento de la grada equilibrar el partido. Y empezó a contabilizar llegadas al área. Fue tarea sobre todo de un Vitolo que se ofrecía constantemente y de los laterales, Mariano y Tremoulinas. Por ahí recuperó el pulso al partido. Y debió recuperar hasta el marcador en un penalti sobre Rami que un nefasto Clos Gómez no señaló. Para colmo de males, porque de males fue la noche, poco después
Krychowiak se marcó un absurdo gol en propia puerta en otra jugada a balón parado. Fue tan ridículo el tanto como ridícula la salida de Sergio Rico, que ni llegó a la pelota ni se quedó en la portería. El portero se quedó a medio camino y permitió que el rebote inocentón del polaco se convirtiera en el segundo gol de la Real Sociedad.
El 0-2 enloqueció directamente al Sevilla, que hasta el final de la primera parte entró en un bucle de precipitación constante, de falta de coherencia y sentido futbolístico que realmente no le llevó a ningún lado. Aunque agotara minutos, lo mejor era que llegara el descanso.
Gameiro recortó distancias de penalti apenas cinco minutos después del descanso, tiempo hubo para la remontada, pero no acierto
Y fue lo mejor el descanso, porque nada más salir de vestuarios, a los cinco minutos, los de Emery recortaron distancias merced a un penalti sobre Krychowiak que transformó Gameiro con un tiro poco sutil pero suficientemente potente para batir a Rulli, que había adivinado la trayectoria. Emery había sacado a Iborra por Cristóforo, con la intención de retrasar a Banega, acertada, y de contar con Iborra en la mediapunta, errado porque el valenciano ni las olió y lo que le faltó al equipo fue remate, es decir, probablemente Llorente, que de nuevo se fue de vacío del encuentro.
Ni contra diez jugadores
Quedaba tiempo de sobra para replantear un nuevo partido con un solo gol de desventaja, y además con una Real que se venía poco a poco abajo físicamente tras su enorme esfuerzo de la primera parte. Y más tuvo que esforzarse porque Markel Bergara echó una mano con una segunda amarilla tan clara como absurda con 20 minutos por delante. Con todo, no llegó a tener claridad el Sevilla en ataque, porque los clarividentes no anduvieron muy lúcidos, pero ocasiones llegaron. A balón parado, de N'Zonzi (suplió a un desafortunado y molesto físicamente Krychowiak); de Gameiro, muy clara tras un mal saque de Rulli y en un disparo cruzado; de Vitolo, que no llegó a un buen pase... Rulli las paraba, pero también las rechazaba, aunque no estuvo fino el Sevilla a la hora de hacerse con esos balones sueltos.
Además, la Real ya se había parapetado y se bastaba con una acertada actuación de sus centrales, sobre todo de Íñigo Martínez, para contrarrestar, en la mayoría de los casos, los previsibles ataques nervionenses.
No encontró los caminos el Sevilla hacia el gol, y dice adiós virtualmente a las posibilidades de ser cuarto, justo antes de uno de los partidos más importantes de la temporada, en cuartos de final de la Europa League ante el Athletic, que no afrontará de la mejor de las formas.
De verdad Eladio, tu crees que Emery le dice a los jugadores que centren al portero en vez de a los delanteros? Hay que ser muy cínico y estar muy obsesionado para pensar eso. Tu pide que se marche, q cuando lo hagas, te arrepentiras y lloraras...
Que la pasao al gran servilleta que nunca perdía en su campo?jajajaja haciendo el baina como siempre dj rico cantando por bularia jajajaja y falleiro con el punto de mira pa gerve jajajaja. Un equipo con 10 y de los de abajo os ha dado por tos laos jajajaja. Si aún os vamos adelantá por la derecha y tó jajajaja.......tiempo al tiempo. Esto no es como empieza sino como acaba jajajaja el que último ríe ríe más jajajaja
!a, aunque tampoco sea tan grave,ya ue la champion es del villarreal desde hace 2 meses y entrar en europa es posible,lo del sevilla hoy en el primer tiempo es vergonzoso,nunca me gusto los invento,emeri el v-aina se creia que la real era un mosquito muerto y le salio el tiro por la cu-la-ta,,,toda via no ha sabido decirle a su portero que no se puede entregar el balon a los defensa del sevilla y mas aun perdiendo,,como tampoco ver a los jugadores cada vez que centran el balon siempre van a las manos del portero, ojala se marche en junio..