El 'no' a Argentina, la pretemporada y la esperada calma
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El Sevilla anda inmerso en la pretemporada más convulsa de los últimos años.
Todo empezó cuando Monchi quiso irse. Parece que ese gesto contagió a Emery, que entre pago de cláusula, la salida de Blanc y su no-despedida del sevillismo, el vasco lo tuvo claro desde el primer momento. Al técnico le siguió Krychowiak y el debate sobre las ventas creció a pasos agigantados. Mientras, llegó Sampaoli, Ben Arfa se escapó, y el Sevilla firmaba a Kiyotake y Sarabia. El debate por los fichajes, las ventas multimillonarias y la subida del carnet calentaban al personal.
En segundo plano, Barça y Atlético se peleaban por Gameiro pero aún sin muchas ganas. Pasaron los días y llegó Kranevitter (con la cesión que cabrea a muchos), el prometedor Correa, y se cerraron las contrataciones de Franco Vázquez y Ganso. Con el dinero invirtiéndose, el sevillismo se calmaba, los entrenamientos comenzaban y todo se enderezaba. Sin embargo, el Atlético se empeñaba en Gameiro y al francés le gustaba la propuesta. Por otro lado, el Sevilla se fijaba en Vietto, el Barcelona también apostaba por el argentino, y el jugador y los colchoneros jugaban a tres bandas.
Con el equipo en Alemania, Gameiro no jugó el primer amistoso y la plantilla estaba sin delanteros a dos semanas de la Supercopa de Europa. Acto seguido, Vietto aterrizaba pero no se vestía de corto. Con todo para firmar, el Atlético le da margen a Diego Costa y el Sevilla aprieta más por Gameiro. Con la paciencia repartiéndose, el francés juega contra el Mainz, juega bien, y algunos piensan que puede quedarse y Vietto volver por donde ha llegado. Por fin Sampaoli dice que se queda y le da puertas a su Argentina. Entre todo esto, Llorente tiene un pie fuera e Immobile los dos, hasta el momento, las mejores noticias para los sevillistas en un verano loco. Con todo esto, el Sevilla tiene la Supercopa de Europa a la vuelta de la esquina. Ya saben que en el fútbol puede pasar de todo y en 90 minutos más todavía. Algunos esperan ganar un título y otros sólo esperan que llegue la calma en una pretemporada que no se olvidará.
Esta pretemporada es verdad que está siendo convulsa, entre otras cosas porque los periodistas tienen que comer como cualquier otra persona y para ello tienen que hacer su trabajo a diario, y la verdad sea dicha, para un periodista deportivo, es difícil publicar noticias contrastadas todos los días, es por ello, que ha de apoyarse en la rumorología, para seguir haciendo su trabajo y dar salsa a la pretemporada que escasea de noticias a diario. A veces aciertan, no saben cómo, pero la mentira en boca de muchos a veces de tanto correr se vuelve verdad. No culpo a los periodistas, es su trabajo, yo también hago el mío, sí o sí. Pero si señalo a Emery como el principal culpable de esta convulsiva pretemporada, y lo señalo como culpable, porque fue un cobarde y hombre de poco honor. Y digo cobarde, por que se planificó un próxima temporada siendo él el que la dirigiera, había apalabrados jugadores con los que no se ha podido contar, y que deja la imagen del club en mal lugar, y digo cobarde porque cuando quiso irse no lo hizo, nos mantuvo en su espera, a que el jeque y su compañero de profesión el entrenador del PSG llegaran a un acuerdo, no fuera a ser que se quedase compuesto y sin novia. Y vuelvo a decir cobarde, porque no tuvo la valentía de despedirse en público de su anterior afición, y que le fue propuesta por nuestro presidente de la forma que él quisiera, con gente del club o sólo, porque encima de no tener palabra, se no ha ido enfadado. Ese individuo, al que le debe todo al Sevilla FC (como el pesetero del Juande que se creyó que era un entrenador TOP) y nadie más ha sido el culpable de todo lo que llevamos soportando, los días que mantuvo el sí pero no por si acaso, si, pero vamos a ver... esos días, retrasaron una pretemporada que estaba ya ultimada. Ni Monchi, ni Pepe Castro, ni nadie del club son responsables de los cambios que ha habido que realizar a marcha forzada, que han hecho que se encareciera los fichajes, sabedores los clubes de la situación en la que quedaba el Sevilla FC por culpa de un cobarde irresponsable, poco serio y poco agradecido, que además se benefició de la información que era patrimonio de nuestro club, intercediendo en jugadores que teníamos hecho y llevándose otros que ya teníamos. De todas formas, creo que con el tiempo nos ha hecho un favor como el Juande. A ver si este, Sampaoli, que no me fío ni un pelo, visto lo visto: No cumplió con la selección chilena, no cumplió con el Granada FC, termine de la misma forma con el Sevilla FC, porque que se puede esperar de alguien así y que además diga que es una irresponsabilidad que a pocos días de partidos importantes, no puede abandonar al Sevilla FC, éste se nos va después de esos dos partidos, ojalá me equivoque.