Pese a ser festivo, el primer equipo del Sevilla FC no descansa y prepara a conciencia el partido del próximo sábado ante el CD Leganés, con la idea de acabar de una vez por todas con su mala racha lejos del Ramón Sánchez-Pizjuán.
Los profesionales sevillistas se libraron del agua, que respetó el entrenamiento. La principal novedad fue la presencia de Daniel Carriço, que completó con normalidad la sesión después de varias semanas de lesión.
Por su parte, Adil Rami entrenó al margan tal y como estaba previsto, aunque evoluciona favorablemente de sus problemas físicos.
Este jueves, el equipo se entrenará a las 18.30 horas a puerta cerrada en la Ciudad Deportiva José Ramón Cisneros Palacios, en la que será la penúltima sesión antes de viajar a tierras madrileñas.