Los condicionantes de la operación de Keita Baldé

Keita Baldé es uno de los jugadores que encabezan la lista para reforzar al Sevilla en la próxima temporada. El senegalés es una de las revelaciones del Calcio y son varios los equipos de primer nivel que quieren firmarlo. Conjuntos como la Juventus, el Nápoles o el Milán ya han preguntado por el africano. Lo cierto es que si los acontecimientos siguen como marchan, Keita Baldé saldrá de La Lazio más pronto que tarde. El futbolisa juega la baza de terminar contrato en 2018.

El cuadro capitaliano está intentando que el futbolista renueve su contrato. Ya van varias ofertas encima de la mesa pero la mala relación del jugador y su agente con Igli Tare, director deportivo de la entidad, es uno de los factores que pueden impulsar la salida del atacante. El presidente, Lotito, espera hacer una subasta con Keita al que tasan en 30 millones de euros, una cifra desorbitada y exagerada para un jugador con un año de contrato por delante. Por otro lado, en el club se le han perdonado comportamientos inadecuados que han lastrado su relación con la entidad. A partir de junio, si el jugador no ha renovado, algo bastante complicado a día de hoy, la Lazio lo venderá por una cifra muy inferior.
Por otro lado, el salario Baldé es otro asunto a tratar. En la actualidad, el futbolista ronda 1,8 millones de euros netos de salario y está pidiendo 3 millones por temporada. Hasta el momento la Lazio se planta en 2 kilos para renovarlo. Esto es como todo. Por pedir que no quede. Lo que está claro es que Keita Baldé tiene unas exigencias salariales que las negociaciones podrán menguar.
Dentro de toda esta operación aparece también Jorge Mendes. Aunque el agente de Baldé es Calenda, persona de enorme influencia en la opinión del futbolista, el portugués tiene intereses en el futuro del delantero y tendrá que opinar en la operación de salida. A todo esto, al Sevilla le gusta el futbolista y el mercado todavía tiene que comenzar.