El Sevilla ha mostrado en estas primeras semanas de competición una gran fiabilidad defensiva. Eduardo Berizzo, a pesar de cambiar la defensa prácticamente en todos los encuentros, ha conseguido crear una fortaleza atrás que les había permitido, hasta este sábado ante el Atlético de Madrid, recibir tan sólo un gol en los cinco primeros duelos de LaLiga Santander.
Ahora, ha encajado en un sólo enfrentamiento más tantos que en todo lo que iba de campeonato, lo que ha llevado al Sevilla a cosechar su primera derrota de la temporada. Los culpables han sido los goles de Yannick Carrasco y Antoine Griezmann en el Wanda Metropolitano, unos tantos que también privan al cuadro de Nervión de ser el equipo menos goleado de Primera división.
El primer gol lo recibió el pasado 19 de agosto frente al Espanyol, en un choque que terminó 1-1 en el Sánchez-Pizjuán. Dese ahí, el sevillismo únicamente había visto a los suyos vencer. Se impusieron 0-1 al Getafe, golearon 3-0 al Éibar, y cosecharon dos triunfos más por la mínima ante el Girona y Las Palmas.
Esto le permitió al Sevilla lograr el mejor arranque liguero de su historia, unos registros que no ha podido ampliar debido a su papel frente al Atlético de Madrid, donde los dos tantos llegaron por desaplicación y falta de contundencia de los de Berizzo. Además, tampoco estuvieron nada acertados en el ataque, como prueba que es el primer encuentro en el que se quedan sin marcar.