La gran apuesta de Óscar Arias en su primera temporada como director deportivo del Sevilla FC fue la de fichar a Eduardo Berizzo, que vino a dar cierta continuidad al proyecto que en la temporada anterior se había puesto en manos de Jorge Sampaoli.
El onubense ha explicado los motivos de esa apuesta en los micrófonos de Canal Sur Radio. “Con la salida de Unai se decidió cambiar el modelo e ir hacia una propuesta que entendíamos que era la más apropiada para continuar el crecimiento del club, con la que el equipo fuera más protagonista”, pero incidió en las diferencias entre los argentinos. “Dos personas no son nunca iguales. Los dos vienen de la escuela de Bielsa, ven el fútbol de una manera similar y entendíamos que era una apuesta continuista, entendiendo que son personas diferentes con matices totalmente distintos. El esfuerzo del club iba a tener una continuidad con este técnico”.
Así las cosas, Arias valoró el inicio de temporada del Sevilla, que a nivel de resultados está siendo prácticamente inmejorable, aunque parte de la afición se queja del estilo del equipo. “El juego del Sevilla es mejorable, todo es mejorable, lo que no quiere decir que lo vayamos a conseguir. Creo que las cosas van a ir poco a poco saliendo mejor al igual que al resto de los equipos de la categoría, por lo que la competitividad se mantiene”.
Además, el director deportivo analizó otros aspectos deportivos del equipo.
La solidez defensiva. “Esto no ha hecho más que comenzar. El entrenador está buscando la fórmula para sacar el máximo rendimiento. Ahora se está mostrando más"La filosofía de Sampaoli hacía que el equipo diera sensación de fragilidad. En eso se ha mejorado". sólido defensivamente, no concedemos demasiadas ocasiones, es un aspecto en el que hemos mejorado con respecto a la temporada pasada”.
La diferencia con Sampaoli. “No teníamos malos defensas, pero sí que el equipo defendía mal. No teníamos un déficit de centrales porque Carriço y Pareja eran los centrales titulares y han dado un rendimiento muy bueno, quizás porque en esos momentos el equipo defendía bastante. Quizás la filosofía de Sampaoli hacia que el equipo tuviera lagunas atrás, los equipos contrarios nos hacían daño y dábamos sensación de fragilidad. En eso se ha mejorado. Es verdad que el equipo con Sampaoli evoluciono a un futbol de posesión casi excesivo, de muchísimo toque casi sin profundidad, y Eduardo no está por eso. Quiere que sea vertical y busque la portería”.
Berizzo busca el control. “No creo que quiera un equipo de ida y vuelta, eso te interesa cuando eres inferior. Si pretendes ser un equipo importante tienes que controlar el partido. Interesa imponer tu supremacía y mayor calidad. Con todos los respetos, el Celta no es el Sevilla. Tenía 13 o 14 jugadores y ahora tiene un plantel con muchísimos más recursos y busca la fórmula para sacar lo máximo en los partidos”.
Las rotaciones. “Hay que gestionar la plantilla no sólo para que esté fresca, sino para que esté enganchada. El futbolista si no juega desconecta, siente que no cuenta y es difícil que mantenga la tensión y la intensidad en el día a día. El día que lo necesites no va a estar en condiciones óptimas”.