Es Noticia

¿Quién es Ernesto Marcucci?

B.G.

A Ernesto Marcucci los avatares de la vida le han puesto ante la oportunidad de su carrera. Una oportunidad que nunca habría querido tomar, al menos de esta forma, provocada por la enfermedad de su amigo de la infancia, Eduardo Berizzo, con el que comparte confidencias y su forma de vivir. Una vida dedicada al fútbol que ahora pasa por el Sevilla FC.

Apenas un día después de que se anunciara que su jefe se iba a retirar momentáneamente para tratarse de su enfermedad, le llega la alternativa. Este martes dirigirá su primer entrenamiento, dará su primera lista de convocados y ofrecerá su primera rueda de prensa. Muchas emociones para una ‘primera jornada de trabajo’ atípica. Ya el miércoles, se enfrentará a la banda del Sánchez-Pizjuán como cabeza visible del banquillo, aunque en eso sí tiene experiencia, ya que tuvo que hacerlo en el partido de Champions ante el Maribor debido a la sanción a Berizzo.
Marcucci es uno de esos hombres que sin haber jugado a un alto nivel, ha conseguido llegar a la élite de los cuerpos técnicos. Nación en Cruz Alta, como Berizzo, con el que incluso compartió casa en Rosario cuando el primero se labraba una exitosa carrera jugando en la base de Newell’s y el segundo para Renato Cesarini, un equipo de menor categoría que apenas jugóLlegó a la cantera de River Plate, pero decidió colgar las botas para estudiar derecho y dedicarse a la abogacía... hasta que Berizzo le llamó para ser su segundo. en dos ocasiones en la Primera Nacional argentina. Ese fue el ejemplo de la carrera futbolística de uno y otro. Mientras Berizzo triunfaba en Europa, Marcucci nunca llegó al fútbol profesional y se dedicó a la abogacía.
"Jugué en las inferiores de River, pero no llegué a ser profesional. Llegué casi hasta el reserva y ahí decidí colgar los botines, como decimos en Argentina. Yo, mi autoexigencia, veía que mi progreso no era como esperaba y decidí estudiar. Tuve el apoyo de mi familia y decidí desempeñarme en una profesión que ejercí durante bastantes años", explicó en una de sus pocas comparecencias en Vigo.
Pero la amistad entre ambos perduró, y cuando el ‘Toto’ se retiró y empezó a ejercer como técnico en seguida contó con su amigo de la infancia como colaborador. Regresó al fútbol haciendo labores de ojeador a distancia para la selección chilena, llamado por Berizzo, que mientras hacía prácticas aceleradas junto al simpar Marcelo Bielsa.
En cuanto Estudiantes de La Plata se fijó en el hoy técnico del Sevilla, Marcucci colgó las togas y dejó de lado los enormes tomos de leyes para enrolarse en una aventura que continúa. Estuvo con él también en O’Higgins y en el Celta, y evidentemente también en Sevilla.
"Me pregunto de forma permanente de qué me sirvió mi profesión y me ha ayudado en la constancia, más que nada durante los seis años de estudio. Cuando tengo que estar ocho o nueve horas analizando a un rival, no me afecta a la concentración porque lo hice como estudiante cuando no me quedaba otra. Es lo que más rescato", añadía.
El abogado hoy, por circunstancias, es el primer entrenador interino del cuarto equipo de España y el séptimo del ranking UEFA. Seguramente nunca se imaginaría en estas cuando colgó las botas y se decidió por el derecho. De todas formas, estará deseando que esta oportunidad acabe y volver a sentarse al lado de su amigo de niño en el banquillo de Nervión. Y que sea lo antes posible.

Escribir comentario 0 comentarios
Deja una respuesta
Su comentario se ha enviado correctamente.
Su comentario no se ha podido enviar. Por favor, revise los campos.

Cancelar