Un Sevilla sin referente ofensivo

El Sevilla FC tiene lagunas en varias de las demarcaciones, demasiadas. Los aficionados ni siquiera tienen claro cuál reforzarían antes. Un central, un lateral derecho, otro centrocampista, la delantera…

Esta última posición es una de las más criticadas. Óscar Arias decidió en verano dejarla con sólo dos efectivos, Luis Muriel y Wissam Ben Yedder. Aunque el galo está respondiendo de forma notable en la Liga de Campeones, lo cierto es que en la competición doméstica ninguno de ellos está aportando lo esperado.
De hecho, el colombiano y el francés suman tres goles cada uno, lo que les sitúa igualados como máximos goleadores del equipo, pero sitúan a la vanguardia nervionense en una situación que no se daba desde hacía más de 30 años.
Concretamente, es la segunda vez en la historia en la que ningún futbolista del Sevilla sumaba al menos cuatro goles en las 16 primeras jornadas. La vez anterior fue hace 33 años, concretamente en la temporada 84/85.
Aquella temporada, sólo Martín Pérez llevaba tres goles a estas alturas, aunque él los hizo todos en un partido ante el Athletic Club y no volvería a marcar. En la jornada 16, el equipo blanquirrojo había anotado sólo 11 tantos.
Al término de la temporada, únicamente Magdaleno, que acabó con ocho goles, y Francisco López Alfaro, marcó cuatro, superaron los tres goles al final de temporada. El equipo del Sánchez-Pizjuán acabó la temporada con apenas 29 goles y en una discreta duodécima plaza.