El año liguero ha empezado para el Sevilla igual de mal que el acabó. Cada vez más lejos de la Liga de Campeones, el conjunto de Vincenzo Montella no encuentra la fórmula para salir de la crisis, ya ni con el cambio de entrenador. Ni tampoco para acabar con una estadística que se ha convertido en una maldición. O mildición, según se mire.
El Sevilla lleva desde el pasado 2 de diciembre sin ganar un partido en LaLiga Santander, que fue la victoria número 999 en toda su historia en la Primera División. Tras ese choque ante el Espanyol en el Sánchez-Pizjuán ha sumado apenas un empate en cinco partidos (Levante, 0-0). El resto, derrotas frente al Real Madrid (5-0), Real Sociedad (3-1), Betis (3-5) y Alavés (1-0).
Una caída en picado que ya le costó el puesto a Eduardo Berizzo y que ahora amenaza incluso con dejar fuera de los puestos europeos a un Sevilla repleto de problemas... y sin fichajes, salvo Arana.
La próxima oportunidad del Sevilla para romper esta maldición será el sábado a las 13.00 horas ante el Espanyol, otra vez a domicilio.