Un mes y los fichajes no carburan

El Sevilla acudió al pasado mercado invernal en busca de encontrar refuerzos óptimos para paliar las carencias registradas en el primer tramo de temporada. Hasta cuatro fichajes que terminaron llegando pero que no han logrado rendir al nivel esperado, pues Montella parece haber encontrado en casa las incorporaciones que buscaba fuera, con la recuperación de hombres como Nzonzi o Muriel y la reconversión al lateral de Jesús Navas.

Arana, Roque Mesa, Layún y Sandro aterrizaron el pasado mes de enero en Sevilla cumpliendo así los planes propuestos por la secretaría técnica de la entidad, esperando de ellos unos resultados que, de momento, no han llegado. El primero de ellos ni está y casi ni se le espera. El brasileño fue el primero en llegar a la disciplina sevillista, cumpliendo así los deseos de un Óscar Arias que se reforzó con el que se presuponía como el lateral con más proyección de Brasil, pero el bajo estado de forma con el que ha llegado aún retrasa su puesta de largo. Pese a ello la cita ante el Málaga se presenta como la oportunidad definitiva para ver su debut, a pesar de quedarse fuera ante el Atlético, pues la sanción de Escudero y la lesión de Jesús Navas deja al equipo con los laterales en horas bajas.
La aparición de Roque Mesa en el Sevilla puede vislumbrarse a cuentagotas. Si bien es cierto que era el fichaje que más ilusionaba, la vitola de sustituto de Banega no ha terminado de cumplirse pues cuando este faltó por lesión fue Guido Pizarro el que lo sustituyó. La empecinada intención de Montella de no rotar ha lastrado los planes de un Roque Mesa que apenas ha contado con 67 minutos y que, a excepción de Arana, es el refuerzo que menos ha jugado. Una incorporación que se convirtió en la que más ilusionaba pero que deberá esperar para recoger los galones que se le presuponían.
Miguel Layún resume lo que parecía ser y no fue, de momento. Con el rendimiento mostrado hasta la fecha, poco se puede recordar del azteca más allá de su fichaje tras la polémica con el Real Betis. Las necesidades del equipo han hecho que sea el refuerzo con el que más ha contado Montella desde su llegada pero los errores que ha firmado parecen haber terminado de condenarlo. El rendimiento del mexicano no ha sido el esperado, protagonista en la goleada del Éibar, el triunfo ante Las Palmas donde cometió el penalti que les dio vida y en la dolorosa derrota del pasado domingo ante el Atlético, donde el lateral se vio sobrepasado en demasía por los arreones colchoneros que lo pusieron en la picota de la afición.
Poco puede decirse también hasta la fecha de Sandro Ramírez. El ariete canario tuvo protagonismo en las rotaciones de Montella frente al Éibar, donde el rendimiento del equipo terminó contagiando a todos. Tras ello, minutos sueltos ante Las Palmas, Manchester y Leganés que no han permitido vislumbrar la valía que se le presupone y que resultan insuficientes para convencer al técnico. De hecho, Montella sorprendió a todos dejándolo fuera de la convocatoria ante el Atlético por lo que deberá esperar para tener una nueva oportunidad.
Sin embargo, la carga de partidos de la semana que se avecina se presenta como una oportunidad idílica para devolverle la oportunidad a los menos habituales, para que puedan reivindicar un puesto en el once. El cansancio acumulado y el tramo que se avecina apuntan a que la cita ante el Málaga permitirá al entrenador dar relevo a los fichajes y brindarle una nueva oportunidad para que puedan demostrar el por qué de sus llegadas a la capital hispalense.