Más allá del resultado y la victoria del Sevilla FC sobre el Deportivo Alavés en sí, la rueda de prensa de Joaquín Caparrós giró sobre la emoción que ha sentido en esta corta pero intensa segunda etapa en el banquillo nervionense.
El utrerano comenzó dando las gracias “a nuestra gente, a la afición y a los futbolistas”. “La afición es muy grande y es un privilegio ser sevillista. Gracias a mi padre que me hizo sevillista”, recordó.
“Cuando me traía mi padre a la entrada de infantil era impensable que el día de mañana iba a ser el entrenador del Sevilla e iba a tener el cariño de la afición. Estaré siempre en deuda por darme la oportunidad, a los directivos, presidentes, futbolistas, al director deportivo Monchi… que hicieron que yo estuviera aquí”, agradeció Caparrós.
Además, reconoció que se ha emocionado con el homenaje que le ha dado la afición en el tramo final. “Era la lluvia. La lluvia en Sevilla es una maravilla. Es lógico. Los títulos te dan un prestigio, te dan caché, económicamente posibilidades, pero estas situaciones te tocan la fibra, eso no tiene precio. Hay quien prefiere una cosa y yo prefiero la otra. Le doy las gracias a toda esa gente y a mi padre que me metió por vena el sevillismo”, expresó.