El Sevilla Fútbol Club acelera a marchas forzadas para culminar las obras que el club está realizando en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Esta remodelación permitirá a la entidad disponer de un total de 947 asientos y siete puertas de acceso más para la comodidad y seguridad de los aficionados.
Unas obras que están presupuestadas en una cantidad algo superior al millón de euros y en las que el Sevilla se ha obligado a trabajar a marchas forzadas si quiere que el estadio luzca en perfectas condiciones de cara a la primera previa de la Europa League.
De hecho apenas quedan quince días para que el conjunto sevillista haga su puesta de largo de la temporada 2018-19, donde se enfrentará al vencedor del encuentro que disputarán el Neftci de Azerbaiyán y el Ujpest de Hungría. Un estreno adelantado que hace de las obras un problema menor pero real, pues el Sevilla debe agilizar el proceso para que el feudo nervionense quede remodelado en gran medida para esa fecha.