El nombre del día en el Sevilla FC es el de Steven Nzonzi. El centrocampista ha regresado de sus vacaciones tras proclamarse campeón del mundo con Francia, pasando el reconocimiento médico. Lo normal es que Pablo Machín se pronunciara sobre su situación en la rueda de prensa previa al partido ante el Zalgiris Vilnius, y así lo ha hecho el soriano.
El entrenador ha sido cuestionado sobre si mantiene la esperanza de que Nzonzi siga a sus órdenes toda la temporada, pese a que él haya manifestado en varias ocasiones que se quiere marchar. “Claro que tengo esperanza. Esperanza no, la certeza. Es jugador del Sevilla, campeón del mundo, no todos los equipos pueden tener un jugador como él. Cuento con él. Esta tarde hará su plan de entrenamiento. Encantado de que esté y deseando que pueda entrar”.
En la tarde de este miércoles mantendrá su primer cara a cara con él, aunque ya ha tenido otras conversaciones. “Hablar siempre hay que hablar. Hablé con él para felicitarle, comunicarle las vacaciones y cuando tenía que volver. Quiero ser respetuoso, pero aquí tiene un contrato un en muy buen club en el que crecer y se debe al Sevilla. El que se quiera ir tendrá que abonar una clausula o traer una oferta que el club considere conveniente. Nzonzi no es campeón del mundo por casualidad y es un referente en el Sevilla. Esta tarde estaré con él, hablaré, y él me ha transmitido que es un profesional. Todos queremos aspirar a mas, pero el paso es hacerlo bien en el club en el que está”, finalizó.