Machín asume como "una obligación" eliminar a un Villanovense al que respetan
El entrenador del Sevilla, Pablo Machín, afirmó que "es una obligación" para su equipo eliminar este miércoles, en la vuelta de los dieciseisavos de final de la Copa del Rey, al Villanovense, conjunto de Segunda B con el que empató a cero en el partido de ida, y al que dejó claro que respetan.
"Todo el mundo somos conscientes de que el Sevilla es superior, pero no es la primera vez que un equipo de Segunda B se lo ha puesto difícil a uno de Primera", aseguró este martes Machín, quien alineará "a los mejores para ganar" sin olvidar "el partido contra el Valencia en Mestalla" del domingo.
El preparador sevillista anunció, por ello, que "actuará la gente que esté más fresca" y también precisó que confía en sus suplentes, que no fueron "capaces en el primer partido de solventar" la clasificación y que "ahora van a tener la oportunidad de encauzar la situación".
Aún así, resaltó el "respeto" por un Villanovense que puede llevar al Sevilla a "ser uno de esos titulares de la prensa de mañana", advirtió, por haber "quedado eliminado o haber sufrido".
Machín lamentó la nueva lesión de Aleix Vidal, que, unida a la de Jesús Navas, le obligará a "competir varios partidos sin ninguno de los carrileros" diestros del plantel, pero recordó que "el equipo, ante estas adversidades, siempre ha sabido reponerse".
En este sentido, avanzó además que para el duelo frente a los extremeños "es probable que no esté" disponible Pablo Sarabia, que podría desempeñar esa función en la banda derecha, por molestias en un aductor.
A pesar de la segunda plaza en la Liga, el técnico soriano cree que "para un equipo como el Sevilla el objetivo tiene que ser estar en Europa", pues, a pesar de que "evidentemente" desea "estar en 'Champions'", sabe que "eso es enormemente difícil porque tres puestos, si se es objetivo, están adjudicados".
Machín compareció ante los periodistas en la Ciudad de los Niños del hospital de San Juan de Dios de la localidad sevillana de Alcalá de Guadaíra, donde acudió para visitar a los pacientes junto a representantes de su cuerpo técnico y de la directiva sevillista, así como de los jugadores Tomas Vaclik, Luis Muriel y Pablo Sarabia.
"Hemos intentado poner nuestro granito de arena para ayudar a los chicos y a sus familias e intentar facilitarles un poco más unas horas del día. La próxima victoria que logremos estará dedicada a ellos", destacó.