Protagonismo y flexibilidad: Así será el Sevilla de Lopetegui

Monchi lo tenía claro. Lopetegui era el elegido y se sentará en el banquillo del Sánchez-Pizjuán la próxima temporada. En junio de 2016 el isleño ya quiso que el Sevilla diera un paso más con la llegada de Sampaoli. Cambiando, además, de manera evidente el estilo de un equipo que venía de ganar tres títulos de la Europa League consecutivos con Unai Emery. El argentino fue el último entrenador que firmó antes de marcharse, y en su vuelta mantiene la idea de que el Sevilla busque subir ese escalón.

Y para conseguir ese plus que haga al club más competitivo, la elección es Julen Lopetegui. Un técnico que conoce LaLiga, que sabe de la exigencia del club, que tiene un buen currículum y que se adapta a las características que Monchi quiere en esta nueva etapa: buen trato de balón, presión alta, equipo competitivo y flexibilidad táctica.

Salvo cambio radical en sus planes, el entrenador vasco utilizará un 4-3-3 como sistema base. Aunque no estamos ante un técnico que muera con una idea. Julen es flexible y se adapta bien al rival. Tanto en el Porto como en la Selección ha variado a formaciones de tres centrales o 4-2-3-1 con doble pivote según la necesidad. Siempre, eso sí, con unas pautas similares en todas ellas: transiciones ofensivas a través de la posesión (sin ser una norma inamovible), una búsqueda rápida del robo y una tendencia a abrir el campo.

Laterales largos; un pivote que sea pivote, pero que sepa jugar; atacantes polivalentes (Dabbur o Munir como ejemplos) y un delantero centro (que en algunos casos ha sido un falso 9).

El de Asteasu llega al Sevilla con un bagaje de altibajos. Buenos registros en categorías inferiores de la selección española (con dos títulos: Europeo sub 19 y Europeo sub 21), luces y sombras en el Porto, paso por la Selección absoluta con sensaciones y cifras muy positivas y fracaso en un Real Madrid sin ambición.

Monchi quiere dibujar un equipo que sea más protagonista, que llegue al éxito dando un salto en su juego y en su idea. Y su candidato es Lopetegui. Una elección que tiene detrás un análisis profundo y unas bases sobre las que caben pocas dudas. El tiempo y los números dirán si se trata de un acierto o no.