La Subdelegación del Gobierno en Sevilla ha acogido este martes la celebración de una junta de seguridad en la que se ha ultimado el dispositivo para el partido que enfrentará al Sevilla FC y al Real Betis Balompié el próximo jueves, día 10 de noviembre, a las 22:00 horas, en el Estadio Ramón Sánchez Pizjuán.
El plan de seguridad se activará mañana miércoles en una fase precrítica, con un dispositivo especial por parte de las Unidades de Prevención y Reacción (UPR) y de la Brigada Policial de Información (BPI) y, una vez que acabe el encuentro, una fase poscrítica, en la que participarán unidades de intervención, y permanecerá en funcionamiento hasta las horas posteriores a la finalización del encuentro.
Los efectivos policiales controlarán la concentración de aficionados en las inmediaciones de los hoteles en los que se alojan los equipos; el traslado al estadio de los equipos, directiva y árbitros, y especialmente, los alrededores del estadio Ramón Sánchez Pizjuán.
Para evitar concentraciones, se procederá a la colocación de vallas perimetrales en las inmediaciones del estadio Ramón Sánchez Pizjuán y en la calle que da acceso a la puerta principal, que permanecerá cortada, siendo únicamente accesible para los equipos.
A este respecto, el subdelegado del Gobierno en Sevilla, Carlos Toscano, ha pedido los aficionados “responsabilidad” para mantener la distancia social de dos metros, el uso de las mascarillas y evitar espacios concurridos, de manera que se puedan mantener las medidas de seguridad y prevención frente al Covid 19. Además, ha llamado a la prudencia para que las aficiones no se aglutinen en los hoteles en los que se concentran los equipos.
Con el objetivo de habilitar las medidas de prevención frente al Covid19, tanto el estadio como las explanadas anexas serán zonificadas.
Desde la tarde del miércoles se realizará la desinfección, limpieza y cierre mediante precinto de las áreas y dependencias de las zonas de paso y permanencia de los miembros de los equipos deportivos de ambos clubes. Se trata de la zona verde, que tendrá máxima protección, e incluye vestuarios, sala de prensa, zona de banquillos, banco de pista de preferencia y todo el terreno de juego.
En los banquillos, los jugadores mantendrán la distancia de seguridad necesaria, de manera que se ha habilitado parte de la grada para ampliar su capacidad.
La apertura de esta zona y el desprecintado de las dependencias se producirá exclusivamente según la necesidad de acceso cuatro horas antes del encuentro.
El estadio al completo ha sido desinfectado y el mismo día de encuentro se realizará una inspección por parte del personal de seguridad privada.
En la zona azul, destinada al desarrollo de actividades paralelas durante el partido, como las áreas para los empleados del club o la producción televisiva, se realizará una limpieza constante.
En el exterior del estadio, la zona roja, se realizará una limpieza exhaustiva 24 horas antes del inicio del partido y exigirá al personal que transite una acreditación