Triunfo vital el que logró el Sevilla FC ante el Real Betis en el derbi. Era importante para los de Julen Lopetegui volver a LaLiga ganando, lo que afianza aún más la plaza Champions. Una victoria que tuvo dos nombres propios: Diego Carlos y Lucas Ocampos.
Más allá de Fernando, decisivo con el segundo gol, la actuación de Diego Carlos fue providencial para negarle cualquier porsibilidad al Real Betis. El brasileño secó a Nabil Fekir y no le permitió tener opción alguna de gol. Más importante si cabe fue el partido de Lucas Ocampos.
Pasado el minuto 50, Mateu Lahoz señaló una pena máxima que no desaprovechó Lucas Ocampos. Luego el mismo argentino se sacó de la chistera un taconazo para dejar en el corazón del área solo a Fernando, que no desaprovechó la ocasión para lograr el 2-0 definitivo.
Aunque el protocolo impedía celebrar el triunfo de una forma aireada, y tampoco se pudo hacer con los aficionados, sí hubo una celebración íntima en el vestuario. Así se vio desde las entrañas del Sánchez-Pizjuán.