La tarjeta de presentación 'Champions' de Acuña

De momento, Marcos Acuña está dando su mejor versión en el escaparate más lujoso, la Champions League. A su buena actuación la pasada semana en Stamford Bridge, el argentino brilló de nuevo este miércoles en el partido ante el Rennes en el que el Sevilla FC consiguió sus primeros tres puntos en la fase de grupos.

Acuña fue un puñal constante en la banda izquierda, pero sin descuidar sus labores defensivas en las pocas veces en las que el equipo francés trató de acercarse a la portería defendida por Yassine Bono. Ya avisó en la primera parte, poniendo de gol a Lucas Ocampos en un mano a mano que acabó desbaratando Gomis.

Pero fue en la segunda en la que realmente brilló el ex del Sporting de Portugal. Para empezar, puso la asistencia de gol a Luuk de Jong en un pase sencillamente extraordinario. Con un defensor encimándole y la pelota botando, se sacó un zurdazo medido para que el holandés fusilara al portero del Stade Rennais e hiciera el gol que, a la postre, sería el de la victoria.

Hubo más. Por ejemplo, una jugada junto al banderín de córner que recordó a la delicatessen con la que se desembarazó de Pulisic la pasada semana en Stamford Bridge, y su participación en multitud de acciones defensivas.

La jugada del gol, por cierto, nace de un pase en largo de Diego Carlos, en la que se convirtió en la gran asociación del partido. Hasta 23 pases se dieron entre sí el central brasileño y el carrilero argentino, más que cualquiera de las otras parejas de jugadores. Recibió dos faltas e hizo otras dos, viendo además una tarjeta amarilla.

Al término del partido, el de Zapala expresó sus sensaciones en las redes sociales de manera escueta. “Gran triunfo para seguir sumando en la Champions League. ¡Vamos Sevilla FC!”, publicó. Modestia para uno de los grandes nombres del partido y un fichaje que ya está calando entre el sevillismo.