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Nervión estalla: cánticos contra Castro y bronca a la plantilla

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Deletree conmigo: P E R I O D I S T A

El sevillismo está que arde. El Sevilla FC lleva cinco partidos en lo que va de temporada 2022/23 y solo ha conseguido un pírrico empate ante el Real Valladolid, gracias a un regalo de Sergio Asenjo a Rekik. El inicio de campaña se suma al mal tramo final del pasado ejercicio, y en Nervión ya están hartos de estar hartos.

Este martes, durante el partido ante el Manchester City y, sobre todo, a su finalización, un amplísimo porcentaje de la afición sevillista expresó su indignación con la marcha del equipo y el club.

Mientras que al balón rodaba hubo algunos silbidos aislados, e incluso algunas zonas pedían la dimisión de Pepe Castro siendo acallados por el resto de los aficionados. Pero lo que suponía una división de opiniones, al término del encuentro fue casi unanimidad.

José Castro, en el palco del Sánchez-Pizjuán (Foto: Kiko Hurtado).

Pitaba Davide Massa el final de los 90 minutos, el 0-4 del imparable Manchester City ondeaba en el marcador y el Sánchez-Pizjuán clamaba contra el presidente. “Pepe Castro, dimisión”, se escuchó quizás más fuerte que nunca, entonando parte de la afición el cántico que se usó en su día contra José María del Nido para pedir también su salida: “Fuera del Sevilla, ya no te quiero…”.

Estos cánticos y muchos más se reprodujeron también fuera del estadio, ya que un grupo de aficionados se congregó en la puerta 1, donde se situaba la zona mixta. Puedes verlo en el vídeo que encabeza esta noticia.

También tras el partido, y con Yassine Bono encendido por un enfrentamiento con un jugador del City hasta el punto de tener que ser retirado por Dmitrovic, la plantilla se acercó a pedir perdón a la zona de Gol Norte, donde se entonaron otros cánticos como “Sevilla somos nosotros” o “somos los Biris, para que sepan quien tienen enfrente”.

La plantilla pide disculpas tras la goleada del City (Foto: Kiko Hurtado).

El descontento es evidente, las miradas se dirigen hacia el palco y José Castro vive una de las peores crisis desde que accedió a la presidencia hace ya casi una década. Los resultados mandan, y los del Sevilla en este inicio de temporada son pésimos.