José Luis Mendilibar y el Sevilla, el Sevilla y José Luis Mendilibar. La ecuación, a principios de temporada, parecía prácticamente imposible de formular, pero la mala situación del club, el adiós de Lopetegui, primero, y el de Sampaoli, después, ha hecho que ambos se encuentren. El técnico admitía hace meses que lo vivido en el Alavés (llegó para las 12 últimas jornadas, como en el Sánchez-Pizjuán) le había hecho aprender, pero ese aprendizaje no le ha evitado firmar por los de blanco y rojo.
En una extensa entrevista en Relevo, Mendilibar comentaba hace meses que a pesar de no haber tenido equipo durante el año estaba "muy tranquilo" y sin mucho "mono" por entrenar. "El año pasado sí lo tenía, pero este año ya no lo tengo. Sé que si esta temporada no volvemos a entrenar, tenemos que hacerlo en verano, porque no podemos estar otro año parados", decía antes de llegar al Sevilla.
El técnico, según cuenta, tuvo ofertas antes de la de Nervión, pero las rechazó por lo aprendido en su última aventura, en el Alavés. "Hemos dicho que no, no por nada en concreto, pero la experiencia con el Alavés nos ha servido de aprendizaje. Fíjate, con 60 tacos yendo a entrenar al Alavés pensando que tienes un buen equipo, jugadores que se adaptan a tu idea y no sale. Aprendiendo todavía con mi edad".
En su presentación con el Sevilla, Mendilibar ha repetido varias veces lo de "buenos jugadores" -como le sucedió en el Alavés-, pero el ex del Eibar espera que esta vez sea todo diferente: "Estoy convencido de que vamos a sacar esta situación adelante".