Lo recordará toda su vida. El 'huevo' Acuña regaló al sevillismo el tanto que parecía brindar la tranquilidad definitiva y, momentáneamente, tres puntos decisivos para que el Sevilla FC diese un zarpazo para poner tierra de por medio con la zona de descenso... aunque el Celta de Vigo disipó esas ilusiones con dos goles en el descuento.
A falta de diez minutos para el final, y cuando más flaqueaban las fuerzas, el argentino tiró de casta para robar un balón en campo rival. Acuña fue encontrando espacios desde el centro del campo hasta llegar al balcón del área, donde levantó la cabeza y le pegó con el alma para hacerla imposible para Iván Villar. Sin lugar a dudas, el mejor gol de su carrera. Puedes ver el gol del 2-0 en el vídeo de arriba.