Sergio Ramos no se ha querido perder el partido que enfrenta al Sevilla y a la Juventus. Con una camiseta blanca con el número ‘4’, se ha puesto delante del televisor del salón de su casa para vivir el gran encuentro. Una cita que ha querido vivir junto a dos de sus hijos: Alejandro, de cinco años, y Sergio, de siete. El mayor, eufórico por el momento, se ha puesto a cantar el himno del Arrebato mientras saltaban los jugadores al campo. "Sevilla, Sevilla, Sevilla", entonaba el pequeño. Un sentimiento por los colores sevillistas que le ha inculcado su padre, al haber formado parte de las filas de Nervión.
Unas imágenes que el propio Sergio Ramos ha compartido a través de sus stories en la cuenta de Instagram. Un vídeo que ha acompañado con un mensaje de apoyo hacia el club: “Vamos, Sevilla”. Unas palabras que han sido acompañadas por cuatro corazones, dos rojos y blancos. Los colores del Sevilla.
El Sevilla buscará el pase a la final de la Europa League contra la Juventus. Tras el resultado en Turín del 1-1, los de Mendilibar se la juegan en el Ramón Sánchez-Pizjuán. Una competición que es la máxima ilusión de la afición después de una temporada para olvidar. Aunque, desde la llegada del técnico vasco todo ha cambiado en la competición liguera. Ahora el principal objetivo pasa por conseguir la séptima.
Ya está preparando su vuelta al Sevilla