Una de las imágenes más emocionantes de la tarde. El Sevilla FC celebra este jueves la consecución de la Europa League y, tras pasar por la residencia de las Hermanitas de los Pobres y por la Puerta de Jerez, hizo parada en La Catedral, lugar en el que se vivió uno de esos momentos difíciles de olvidar: el Padre Indalecio, capellán del Sevilla FC, no pudo contener las lágrimas.
Como en todas las celebraciones, a las que gracias a Dios -nunca mejor dicho- el sevillismo está acostumbrado. El Sevilla FC ha ofrecido el trofeo de la UEFA Europa League en la Santa Iglesia Catedral, donde ha sido recibido por representantes de la Archidiócesis de Sevilla.
Con el arzobispo José Ángel Saiz Meneses en México, donde se encuentra por tareas pastorales tal y como explicó en su tuit de felicitación tras la final, los encargados de recibir al equipo en el primer templo de la archidiócesis han sido el capellán del club, el padre Indalecio, don Antero Pascual, vicario espicopal para el clero, y don Marcelino Manzano, delegado diocesano de Hermandades y Cofradías y director espiritual del Seminario, quien tuvo unas palabras en las que se dejó entrever su sevillismo. “Y es que somos el Sevilla FC”, agradeciendo a Mendilibar que se ha ganado “el cariño y el reconocimiento de todos”, decía tras recibir el regalo concedido por el Sevilla (una camiseta con la serigrafía de 'Arzobispo' y el 1 como dorsal).
La comitiva sevillista se desplazó hasta la Capilla Real, donde Rakitic y Jesús Navas efectuaron una ofrenda floral a la Virgen de los Reyes, patrona de la Archidiócesis.
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