Hay palabras que dicen mucho y silencios que lo dicen todo. Generalmente, los vestuarios de los equipos de fútbol son lugares muy bulliciosos, especialmente si las cosas marchan bien. No fue así este sábado en El Sadar, en la caseta de los visitantes, los integrantes de la primera plantilla del Sevilla FC llegaban a la intimidad del vestuario con un silencio casi sepulcral, después del empate cosechado ante Osasuna en un partido que pudo caer de los dos lados.
Mendilibar, Jesús Navas, En-Nesyri, con una evidente cojera, Pedrosa, Óliver, Juanlu… todos iban desfilando por la puerta de entrada con la cara de quien tiene la sensación de haber podido conseguir algo más. Callados y sin demasiadas ganas de hablar hasta que Ivan Rakitic entró por la puerta y arengó a sus compañeros, ejerciendo de gran capitán.
Puedes ver el extracto en el vídeo que encabeza esta noticia, parte del 'Desde dentro' que ha publicado el propio Sevilla FC en su canal de Youtube.