Convencido de su trabajo, de sus posibilidades y de sus jugadores. Diego Alonso, entrenador del Sevilla, compareció este martes en sala de prensa y no quiso mostrar ni un solo signo de debilidad antes de una de las citas que bien podría decidir su destino en el club hispalense.
La tarea, con la cantidad de bajas acumuladas, parece que no será sencilla, pero Diego Alonso no quiere que haya excusa alguna. Tal y como explicó el técnico, Badé será baja ante el PSV, mientras que Soumaré es duda hasta última hora. "Seguramente el club dará el parte médico, pero Badé sufrió una lesión, no está disponible. Soumaré es duda, tiene una molestia en el tobillo que arrastra desde el día del Arsenal, pudo jugar el derbi, en la semana ha tenido alguna complicación, ante la Real no estaba bien, es duda para el partido de mañana".
A pesar de todos los problemas, en físico y resultados, Diego Alonso defendió que "entre nosotros hay un gran ambiente. Dolidos por los resultados, nos duele mucho, pero sabemos que para poder salir, lo que nos queda es trabajar y para eso tiene que haber ganas, eso los jugadores lo tienen. Tenemos ambición, fíjate si tenemos ambición, que estamos en un mal momento y hablamos de pasar a octavos. No nos rendimos, de ninguna manera".
"No, no creo. Creo que la situación de Jesús es una situación de gestión. Para mi gusto, un jugador implecable, 20 años de carrera, que hizo un gesto, a mi entender, que no está acorde a la sanción que recibió. Es un tema de gestión. No me gusta criticar al árbitro, los equipos tienen que ser mejores que el arbitraje. Es un tema de gestión", cerró sobre futbolistas individuales en su comparecencia.