Quique Sánchez Flores, entrenador del Sevilla FC, realizó la habitual ronda de entrevistas tras la durísima derrota de este domingo ante el Girona y dejó claro que su equipo se ha equivocado tras el gol de Isaac Romero: "No era la mejor manera".
"Nos hemos equivocado", comenzaba contando en SFC TV. "La salida ha sido buena, la intención era quedarnos altitos, pero no siempre presionando, porque llevar la línea de cuatro al mediocampo no era la mejor manera", añadía.
Respecto a la interpretación de su equipo, Quique admitió que "hemos abierto nosotros el partido presionando tan alto, sin agarrar la pelota. Les hemos dado 50 metros a nuestra espalda y les hemos abierto un partido que tenía que tener inteligencia colectiva. Lo normal era situarnos, a partir de ahí elegir opciones".
En la misma línea, y tras pedir perdón a la afición "porque somos el Sevilla y esto es muy doloroso", Quique apuntaba a que "me preocupan las mentes de los jugadores, las lecturas de partido".
Posteriormente, en DAZN, Quique insistía en que "confíabamos que Nianzou, con su velocidad y su físico, podía competir con Savinho, pero otra cosa es hacerlo con 50 metros a su espalda. Había demasiados espacios, ellos corren muy bien, no queríamos eso, queríamos un planteamiento alto, no hemos leído bien después del primer gol".
Finalmente, adelantaba que Badé sufrió una "sobrecarga", y sentenciaba su comparecencia con un mensaje muy doloroso. "Siempre pensamos que podemos hacer buenos partidos, pensábamos que en Getafe podíamos hacerlo y aquí también lo creíamos. La realidad nos dice que siempre que damos un pase adelante, volvemos a errores antiguos. Yo asumo errores, pero tenemos que reflexionar mucho".