Valentín Barco, con permiso de Kelechi Iheanacho, debe ser el siguiente en salir en el Sevilla. El lateral zurdo argentino, como el atacante, tampoco se ejercitó este domingo con sus compañeros y su anuncio con el Estrasburgo solo es cuestión de tiempo.
Sin apenas minutos en este primer tramo de la temporada, Valentín Barco comunicó al Sevilla, de la mano del Brighton, que quería romper su cesión semanas antes del inicio del mes de enero.
El argentino tenía clarísimo que, dadas sus oportunidades y las críticas públicas de su entrenador tras un discreto inicio de temporada, no podía seguir en el Sevilla e incluso antes de tener opciones serias solicitó no ir convocado con sus compañeros para el encuentro en la Copa del Rey ante el Almería.
Su decisión, lógico, no gustó demasiado ni al cuerpo técnico ni a sus compañeros, que a pesar de entender que estaba en proceso de salir, también sentían que se trataba de una falta de compromiso importante. Desde entonces, un par de sesiones con el grupo y una larga molestia física que le ha tenido en el gimnasio durante todo el mes de enero.
En estas, tras estar muy cerca del Oporto en un par de ocasiones -su pareja llegó a publicar una imagen haciendo una mudanza-, el todavía futbolista perteneciente al Brighton ha tenido que esperar hasta última hora para salir del club.
Como os adelantamos en ElDesmarque, el Estrasburgo era el mejor colocado, aunque no el único, para llevarse su cesión hasta final de temporada -que irá con opción a compra incluida- tras su mal paso por Sevilla y ahora todo es cuestión de tiempo.
Su pareja, otra vez, compartió este sábado una imagen en redes sociales en una habitación de un hotel en la que se pueden ver todas las maletas e incluso objetivos de mascota, preparados para salir pitando.
En Francia, por su parte, esperan que todo quede resuelto este mismo domingo, que el futbolista pase reconocimiento médico y, posteriormente, anunciar su llegada.
En el Sevilla liberan otro dorsal y despiden a un futbolista que, a pesar de un inicio prometedor, nunca congenió demasiado con la idea del entrenador y sus compañeros. ¿El sustituto? A menos que todo cambie en demasía, Kike Salas apunta a ocupar su lugar.