La solidez defensiva se derrumbó en Vitoria. El Alavés desarmó al Sporting desde el primer minuto. Cuéllar, que tan solo había encajado tres goles, tuvo que recoger por tres veces el balón de su portería. El conjunto vasco supo hacerle daño a los rojiblancos, los balones en largo a la espalda de los defensas dejó en evidencia en varias ocasiones, la "fortaleza" asturiana.
Con los tres goles del pasado domingo, el Sporting pasa a ser el séptimo equipo menos goleado de la categoría.