La barrera infranqueable del Sporting
Luis Hernández y Bernardo Espinos forman en el Sporting la pareja perfecta. Los dos centrales del conjunto rojiblanco se compenetran a la perfección sobre el terreno de juego y el equipo lo nota en la seguridad que transmiten durante los partidos. Su trabajo sumado al del resto de los compañeros hacen que el Sporting sea el equipo menos goleado y el único invicto de la categoría.
La llegada de Abelardo al Sporting ha cambiado la imagen de un club que necesitaba un hombre que transmitiera los valores de Mareo. 'El Pitu' ha conseguido hacer un señor equipo desde la portería hasta la delantera pasando por el banquillo y terminando en la grada donde los descartes observan los encuentros con atención.
Uno de los ingredientes principales de este Sporting es la solidez defensiva, el orden y la solidaridad de todos los jugadores cuando la pelota comienza a rodar. Cuesta destacar a un jugador por encima del resto porque todos están rindiendo a un nivel sobresaliente, pero en la línea de atrás hay dos hombres que son una auténtica muralla.
Los dos centrales del Sporting son infranqueables, en cada partido demuestran su superioridad en cualquier acción en la que el balón no tiene dueño, porque en contadas ocasiones el delantero rival consigue ganarles la batalla. Ambos se rinden en elogios cuando hablan de su compañero de fatigas, Bernardo asegura de Luis que "es la pareja de baile que me hace mejorar. En Luis he encontrado un buen compañero y estamos sincronizados. Nos parecemos mucho en nivel mental y en cuanto la actitud sobre el terreno de juego". Por su parte el madrileño afirma que "mirar para la izquierda para mí significa seguridad".
Tanto Bernardo como Luis destacan la excepcional labor que está realizando Abelardo desde el banquillo. Un futbolista de la talla de 'El Pitu' que jugó en su posición es algo que no quieren dejar escapar para asimilar conceptos. Bernardo dice que "como central lo fue todo y yo me centro en mejorar con sus consejos. Su pensamiento siempre se basa en la defensa y ha sabido plasmarlo en el resto del equipo. Es el que lleva el mando de este barco y estamos dispuestos a todo", y Luis comenta que "sabe generar una confianza especial y el trato al joven lo tiene muy bueno. Para mí jugar de central es nuevo, pero Abelardo me está dando la confianza necesaria. Tenemos que ser como esponjas para adquirir todos los conocimientos posibles".
Sobre sus compañeros, los dos jugadores coinciden en que fijarse en la defensa para hablar de la solidez defensiva del equipo es un error porque estar invictos y ser el equipo menos goleado de Segunda División es la consecuencia del buen trabajo de todas y cada una de las personas que forman la primera plantilla del Sporting. "El fútbol es un deporte colectivo y así estamos jugando. Conseguimos que se hable del Sporting y no de determinados jugadores. Es difícil que se hable de uno de nosotros porque todos estamos haciendo muy bien nuestro trabajo", afirma Bernardo. Por su parte Luis Hernández también quiso destacar la labor de los centrocampistas: "Sergio y Nacho Cases hacen un trabajo muy importante para nosotros. Probablemente no se aprecie, pero el centro del campo está haciendo una labor esencial. Si aprietan bien arriba las jugadas que llegan atrás vienen más filtradas y eso nos ayuda mucho".
Sin duda las cosas en el Sporting, en lo deportivo, están saliendo a la perfección y los jugadores están ganando en confianza. Nadie hubiese apostado por un comienzo liguero tan esperanzador como el que está realizando el conjunto de Abelardo, pero lo que está claro es que están abriendo el camino de la ilusión. Por cierto, que si alguna vez se han preguntado si este equipo es realmente invencible, Luis Hernández dijo entre risas que no y que algún día llegará un delantero que pueda escalar la muralla que forman los dos centrales rojiblancos. Dos hombres que cada semana demuestran que sienten los colores y el escudo del Sporting como si hubiesen nacido en Gijón.