El Sporting de Gijón B tiene tomada la medida al Oviedo en El Molinón. Ambos se han enfrentado en cinco ocasiones en Segunda B, con tres victorias locales y dos empates. El eterno rival, que solo ha hecho dos goles en el municipal gijonés, tocó fondo en la temporada 2012-13, en la que cayó goleado (4-1) con cuatro goles de Guerrero.
Es el partido favorito del Sporting B y el más desagradable para el Oviedo. Los dos vuelven a enfrentarse este fin de semana, en una cita en la que los ovetenses están obligados a ganar. Su presupuesto es muy superior al del equipo de Mareo, aunque las fuerzas siempre se igualan cuando se ven las caras en El Molinón. Se igualan o mejor dicho se decantan claramente del lado gijonés.
En esa línea, el Sporting B nunca ha perdido en casa frente al primer equipo carbayón, al menos en Segunda B. El primer precedente, en el curso 2009-10, se saldó con un triunfo por la mínima gracias a un tanto de Carlinos. Las dos temporadas siguientes, sin embargo, el Oviedo respiró o al menos no cayó derrotado tras sendos empates sin goles. No fue más que una pausa en la trayectoria victoriosa del filial rojiblanco ante su eterno rival, sobre todo porque un año después (2012-13) goleó sin piedad (4-1) con cuatro goles de Guerrero. Finalmente, en la temporada pasada, el filial volvió a superar al Oviedo (2-1) con un gol de Juan Mera en los últimos minutos.
En total, incluidos los partidos en el Tartiere, el segundo equipo del Sporting se ha enfrentado al Oviedo en 11 ocasiones en Segunda B, con cinco victorias rojiblancas, dos empates y cuatro triunfos azules. De los éxitos rojiblancos Abelardo fue la gran bestia negra de los carbayones, mientras que Javier Vidales también logró una victoria a domicilio en la campaña 2010-11. En cualquier caso, eso sí, los dos equipos se enfrentan este domingo a las 12 horas con una dinámica claramente opuesta. Mientras el Oviedo es líder en solitario el conjunto de Tomás Hervás, mermado por las bajas y la planificación de la plantilla, ha caído a los puestos de descenso.