Es Noticia
Deportivo de la Coruña
2-3
Sporting
Con los goles llegó la primera victoria
Luis Hernández abraza a Sanabria tras un gol.
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Crónica del Sporting B
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Así vivimos el partido
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Previa del encuentro: En busca del gol y de la victoria
Andrés Maese
Sanabria, Álex Menéndez, Halilovic y Alberto destacaron por encima del resto en la importante victoria que consiguió el Sporting de Gijón en Riazor. Abelardo volvió a sorprender con la alineación y los cambios le salieron a la perfección. Jony quedó en el banquillo para dejar su sitio a Álex Menéndez, que aparte de marcar el gol de la victoria estuvo sobresaliente en la parcela ofensiva.
La locura se apoderó de Riazor en la primera media hora del partido. Sanabria por dos veces marcó para el Sporting ante un Deportivo que no se arrugó y consiguió igualar la contienda en dos acciones a balón parado. En el momento en el que los gallegos tenían a los rojiblancos contra las cuerdas, Halilovic se guió un contraataque que finalizó Álex Menéndez con un disparo ajustado para locura de los miles de sportinguistas que acudieron a La Coruña.
Los nuevos están marcando la diferencia, y es que tanto Sanabria como el pequeño croata han llegado a Gijón para seguir creciendo como futbolistas y demostrarle a la Roma y el Barcelona, respectivamente, que no se han equivocado en apostar por ellos. Los dos estuvieron presente en dos de los tres goles de su equipo y cuando la calidad se junta, no hay nadie que pueda pararla.
Los primeros 10 minutos del Sporting en Riazor son para enmarcar. La creatividad, la sencillez a la hora de jugar y el gol que demostró el delantero paraguayo se juntaron en dos acciones dignas de analizar por la precisión de los pases y el final inesperado para muchos. En un abrir y cerrar de ojos, el equipo de Abelardo Fernández se puso con dos goles de diferencia en el marcador, pero aún quedaba mucho partido. Quedaba tanto, que el Dépor no se rindió y encontró el empate en dos saques de esquina que les metió en un partido del que no se habían enterado que ya había comenzado.
Los gallegos llegaron dos veces y marcaron y eso a ningún portero le gusta y menos a Alberto García que se vio con la titularidad encima cuando Cuéllar comunicó en el calentamiento que no estaba para jugar. El catalán estuvo impecable, realmente demostró que quiere jugar y que está para participar en Primera División cuando el técnico gijonés lo desee. Su primera mitad fue discreta aunque demostró que también puede volar sin alas ante un disparo de Luis Alberto. En la segunda parte dio un auténtico recital bajo los palos que ayudó a que el Sporting sumara la primera victoria de la presente campaña.
El inicio liguero de 'Los Guajes' es excelso, no hay un pero que poner a los cuatro partidos que han disputado desde que comenzó a rodar el balón ante el Real Madrid. Por cierto que a 'La Mareona' tampoco hay que ponerle ningún pero porque fue tan ejemplar como siempre respetando a la afición rival y animando a su equipo desde el primer minuto.
Llegaron los goles que tanto se echaban de menos y Sanabria firmó dos de ellos dejando claro que es un goleador y que ha venido a Gijón para dejar sus sello en Primera División. A pesar de la victoria y los elogios que recibirá el equipo, Abelardo no estará del todo contento por lo "flojo" que estuvo el equipo en la parcela defensiva, sobre todo en la primera mitad. Un día malo lo tiene cualquiera y siempre que se gane se olvida antes, pero habrá que repasar el partido para corregir errores.
La locura se apoderó de Riazor en la primera media hora del partido. Sanabria por dos veces marcó para el Sporting ante un Deportivo que no se arrugó y consiguió igualar la contienda en dos acciones a balón parado. En el momento en el que los gallegos tenían a los rojiblancos contra las cuerdas, Halilovic se guió un contraataque que finalizó Álex Menéndez con un disparo ajustado para locura de los miles de sportinguistas que acudieron a La Coruña.
Los nuevos están marcando la diferencia, y es que tanto Sanabria como el pequeño croata han llegado a Gijón para seguir creciendo como futbolistas y demostrarle a la Roma y el Barcelona, respectivamente, que no se han equivocado en apostar por ellos. Los dos estuvieron presente en dos de los tres goles de su equipo y cuando la calidad se junta, no hay nadie que pueda pararla.
Los primeros 10 minutos del Sporting en Riazor son para enmarcar. La creatividad, la sencillez a la hora de jugar y el gol que demostró el delantero paraguayo se juntaron en dos acciones dignas de analizar por la precisión de los pases y el final inesperado para muchos. En un abrir y cerrar de ojos, el equipo de Abelardo Fernández se puso con dos goles de diferencia en el marcador, pero aún quedaba mucho partido. Quedaba tanto, que el Dépor no se rindió y encontró el empate en dos saques de esquina que les metió en un partido del que no se habían enterado que ya había comenzado.
Los gallegos llegaron dos veces y marcaron y eso a ningún portero le gusta y menos a Alberto García que se vio con la titularidad encima cuando Cuéllar comunicó en el calentamiento que no estaba para jugar. El catalán estuvo impecable, realmente demostró que quiere jugar y que está para participar en Primera División cuando el técnico gijonés lo desee. Su primera mitad fue discreta aunque demostró que también puede volar sin alas ante un disparo de Luis Alberto. En la segunda parte dio un auténtico recital bajo los palos que ayudó a que el Sporting sumara la primera victoria de la presente campaña.
El inicio liguero de 'Los Guajes' es excelso, no hay un pero que poner a los cuatro partidos que han disputado desde que comenzó a rodar el balón ante el Real Madrid. Por cierto que a 'La Mareona' tampoco hay que ponerle ningún pero porque fue tan ejemplar como siempre respetando a la afición rival y animando a su equipo desde el primer minuto.
Llegaron los goles que tanto se echaban de menos y Sanabria firmó dos de ellos dejando claro que es un goleador y que ha venido a Gijón para dejar sus sello en Primera División. A pesar de la victoria y los elogios que recibirá el equipo, Abelardo no estará del todo contento por lo "flojo" que estuvo el equipo en la parcela defensiva, sobre todo en la primera mitad. Un día malo lo tiene cualquiera y siempre que se gane se olvida antes, pero habrá que repasar el partido para corregir errores.
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