Puntuar en el Sánchez-Pizjuán, una deuda pendiente

El Sporting de Gijón es el claro ejemplo de lo que es capaz de conseguir un equipo haciéndose a sí mismo. Lleva años atravesando una situación societaria muy complicada, casi límite, y sin embargo fueron uno de los tres conjuntos que consiguió el ascenso a Primera División la pasada campaña.

Abelardo Fernández, la persona en la que se encarnan todos los valores de la Escuela de Fútbol de Mareo, fue el encargado de lograr el éxito con una plantilla joven y plagada de canteranos, que devolvieron al club asturiano al lugar que le corresponde con historia.
Esta temporada el Sporting sigue con la misma idea. Por sus limitaciones a la hora de fichar apenas ha podido incorporar como cedidos a Alen Halilovic, Tonny Sanabria y Omar Mascarell. El resto de la plantilla está llena de jugadores muy jóvenes, muchos de ellos debutantes en Primera División.
Tanto es así, que de todos los integrantes de la plantilla sportinguista, tan sólo cuatro saben lo que es visitar el Ramón Sánchez-Pizjuán. Evidentemente se trata de los más veteranos: el portero Iván Cuéllar, los laterales Alberto Lora yRoberto Canella y el centrocampista Nacho Cases.
Curiosamente, ninguno de ellos ha conseguido siquiera puntuar en Nervión en las veces que lo han visitado. Canella lo hizo con el Sporting y con el Deportivo en cuatro veces, y salió derrotado en todas; Alberto Lora visitó el coliseo sevillista sólo con la camiseta rojiblanca; Cuéllar jugó en el 2-1 de la 2011/12; mientras que Nacho Cases estuvo en la última visita sportinguista, saldada con un contundente 3-0 a favor de los hombres que entrenaba el asturiano Marcelino García Toral.
El caso Bernardo
Sí hay un jugador de la plantilla del Sporting de Gijón que sabe lo que es ganar en Nervión, aunque en su caso lo hizo con la camiseta del Sevilla FC. Se trata, evidentemente, de Bernardo Espinosa.
El colombiano debutó en el Sánchez-Pizjuán en la ronda de dieciseisavos de final de la Copa del Rey de la 2010/11, en un encuentro ante el Real Unión de Irún. El Sevilla se impuso por 6-1 y el hoy sportinguista anotó incluso el tercer tanto de los de Gregorio Manzano.