El plan A no funciona
El Sporting acusó sus bajas defensivas frente al Eibar en Ipurua y no pudo evitar una nueva derrota. También fue víctima de su escaso balance ofensivo. Se repitió el guión a domicilio: Aguantó sin demasiados apuros hasta el 1-0 y, después, careció de reacción.
Con Guitián de central y Rachid por Nacho Cases en el centro del campo, el Sporting inició el partido bien posicionado, pero superado por la intensidad del Eibar. Otra de las novedades, Álex Menéndez vio la tarjeta amarilla en su primera acción con Keko. Con el paso de los minutos, los locales redujeron su presión y los rojiblancos comenzaron a pisar el área de Riesgo.
Incluso, prácticamente en la primera llegada, Halilovic dispuso de la mejor ocasión hasta el minuto 23. Él mismo había iniciado la jugada, el balón llegó a Lora, que esperó lo justo para centrar y que definiera el croata. El disparo se fue alto; el Eibar se asustó, pero el Sporting no se dio por aludido.
Pasada la media hora de partido, Borja Bastón reactivó a los suyos con un disparo que Mascarell desvió ligeramente y que Cuéllar despejó como pudo. Se produjo tras un error de Guitián, impecable hasta ese momento.
Resisitió el Sporting tras un gran disparo de Saúl Berjón. Y resistió Rachid, presente en defensa, recuperándose de un pisotón en la acción con la que asistió a Ndi en la última llegada de los rojiblancos en la primera parte.
En la reanudación el Sporting amagó con una buena combinación entre Halilovic y Lora, cuyo centro remató Jony sin precisión. Acto seguido Dani Ndi pidió penalti por mano aunque sólo protestó él, y sin demasiada convicción. No sirvió de mucho, o significó más bien poco, porque Keko hizo el 1-0 en el minuto 54. Recibió dentro del área con un metro de ventaja frente a Álex Menéndez, lo justo para preparar el disparo y batir a Cuéllar. Precisamente Keko, a quien quiso Abelardo el último verano y en una segunda jugada. El Pitu ya lo había advertido.
También había lamentado las ausencias de Bernardo y Luis Hernández. La defensa no se entendió para buscar el fuero de juego y así llegó el 2-0. Berjón coló un pase entre los centrales y Bastón definió ante Cuéllar. Además, pudo llegar el tercero si Jorge Meré no lo evita sobre la línea de gol. Segundos antes Abelardo había metido a Isma López y Carlos Castro por Álex Menéndez y Sanabria. Al paraguayo no se le vio. Desaparecido.
Poco más ofreció Carlos Castro, aunque al menos lo intentó ante Ramis, que bloqueó su tiro. También Dani Ndi, Halilovic y Jony con disparos altos, cuando el Sporting ya jugaba con tres defensas. El partido, al menos, terminó con los rojiblancos en el área local. Eso sí, con pocos argumentos más allá de la voluntad de Dani Ndi. A los de Abelardo, probablemente, les faltó convicción, atrevimiento para golpear primero. Igual que en las otras cuatro derrotas consecutivas a domicilio.