Vega-Arango, casi tres años después

Se cumplirán tres años el próximo mes de junio desde la salida de Manuel Vega-Arango de la presidencia del Sporting de Gijón. El expresidente del club rojiblanco analiza su gestión al frente del equipo en una entrevista que publica el portal Asturias24.

Vega-Arango afirma que nunca cobró por su trabajo: "Nunca me pagó. Percibía al final y no al principio, cuando se podía, unas cantidades que tenía que justificar para gastos de servicio del Sporting que es muy diferente. Es más desde 2002 hasta llegar a primera división, Manuel Vega-Arango no percibía ni esos gastos personales. Después sí y cobraba cuando dios quería porque lo mandaba a contabilidad y me decían: presidente no tengo... Y yo decía: pues vete liquidándomelo, que es dinero chico... Los presidentes y los consejeros de acuerdo a los estatutos del club no pueden percibir nada y a esto añado que he jugado en el Sporting gratis, es decir, encima de cornudo apaleado".
Su llegada al club: "Nadie quería entrar en 1997 y Fernández que es amigo mío me pidió por favor que lo hiciera. Nuestra amistad ya viene de cuando teníamos 15 años y jugábamos en el Sporting juvenil. En contra de familiares y amigos que me decían que no me embarcara dije sí".
En la entrevista, también hubo tiempo para hablar de Doyen: "Ahora por lo visto se ha arreglado, no hay ningún problema... No me arrepiento en absoluto de lo que hice y creo que el club no siguiéndolo así hace una mala operación porque una cosa es decir que nos dan dos y entregamos diez y no es así. En esos momento críticos en el club, no había una posición económica fuerte porque no entraba dinero, nadie daba nada al Sporting. Los bancos te cierran la puerta y hay que buscar una salida. Hay que recordar el año 2004-2005: paros, ere, concurso de acreedores... Los empleados paraban y salían al campo 20 minutos, eso hay que vivirlo. Había dificultades y hubo que buscar salidas. Una cosa es querer que se tenga un interés importante y otra desmesurado y para eso ¿que se hizo? Coger una serie de futbolistas con sus correspondientes cifras y decir, véndame estos jugadores que si me los vende (por supuesto no eran ni Maradonas ni Messis) se lleva una participación de la venta del jugador en compensación".
 La devolución real a través del acuerdo: "No se devolvían 10 millones porque la devolución era de palabra. En su momento nos habían dicho que confiáramos en ellos y chapeau. Si no se hacía lo que se pretendía porque no salía cambiaríamos el sistema y se ha hecho. Tenía la palabra que es lo más sagrado del mundo y Doyen se ha portado muy bien con la entidad. Prueba de ello es que el pasado lunes firmaron una cosa totalmente distinta a la que habíamos firmado". Vega-Arango mantiene incluso que "ojalá hubiera sido así (recibir dos millones y devolver diez) porque el club hubiera ingresado seguramente 20-30 millones de euros frente a los 7-9 que se hubiera llevado Doyen. Qué pena que no fue así porque igual el Sporting estaba saneado y aquí no es que no tengamos buenos jugadores porque los cuide y los mime, pero no hay Cristianos ni Benzemas".
Su relación con García Amado: "Ese contrato fue roto y se hizo en caso de venta. No me parecía justo que una persona que llevaba aquí 18 años se encontrase con la llegada de un presidente nuevo con su corte y dijese usted a la calle. No quise beneficiar en nada a Alfredo y actué con la máxima justicia. Sólo había una condición: esto con don José Fernández no lo puedes hacer, sólo se puede hacer si viene un nuevo propietario y así se hizo".
Su vuelta al Sporting: "He querido al Sporting con toda mi alma. Mi primer periodo fue una época brillante y fructífera mientras que en la segunda me rogaron que lo cogiera tras la dimisión de Juan Arango. Fue una etapa muy difícil por los problemas y padecimientos que hemos pasado. En el tema de la presidencia de honor no quiero entrar porque creo que no tiene ninguna importancia pero la historia no es así. ¿Cómo voy a renunciar a algo tan querido como puede ser la presidencia de honor del equipo de tu vida? Quien me conozca no puede dudarlo. Lo que no estoy aquí es mendigando nada. Te pueden ofrecer pero no mendigar. Si creen que lo mereces y tiene que ser así ya te lo darán. No pido nada pero pensar que renuncié a algo que era mi vida y que lo ha sido durante tantos años es totalmente absurdo".