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Implicados, unidos y convencidos

Pablo Guisasola

El Sporting de Gijón sigue teniendo complicado el objetivo de la permanencia. Y eso que frente al Sevilla en el Sánchez Pizjuán dio un paso adelante para no perseguir una meta imposible. La plantilla dio por bueno el empate e inmediatamente después comenzó a pensar en el próximo partido. "Vamos, ¡el miércoles!, dijo Lillo nada más llegar al vestuario.

Las reacciones tras el partido, facilitadas en vídeo por el club, muestran una plantilla unida e involucrada. Elderson, que fue uno de los descartes, recibe y felicita a sus compañeros. También se ve a Lora, inédito con Rubi, implicado y animado para lo que resta de LaLiga Santander. "Vamos, vamos, en casa lo hacemos bueno", apuntaba Isma López en el vestuario sobre el punto cosechado.
Por todo esto, la plantilla está demostrando su fortaleza como grupo. Ahora precisamente que llega el tramo decisivo. También que ha encontrado las garantías, con varios jugadores entrando y saliendo al terreno de juego sin apenas repercutir en el rendimiento del equipo. Sin ir más lejos, el Sporting viajó a Sevilla con las bajas de Meré, Douglas, Moi Gómez y Cop, entre otros, lo que no impidió que encadenara su tercer partido consecutivo sin perder.
En general, el vestuario rojiblanco proyectó satisfacción por el empate conseguido en el Pizjuán. El rostro sonriente de Rubi resumió esas sensaciones, así como las palabras de su ayudante, Jaume Torras, evidenciaron la responsabilidad y convicción ante el reto que afronta el Sporting: "La recuperación para el miércoles empieza ahora", repitió varias veces. Se celebró el empate, como es normal, pero sobre todo como trampolín para la cita clave de este miércoles.
 

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